Déficit de fuerza en jóvenes jugadores de rugby de élite: Diferencias entre posiciones de juego y asociaciones con el rendimiento de sprint y de salto

Publicado 6 de junio de 2022, 13:22

Déficit de fuerza en jóvenes jugadores de rugby de élite: Diferencias entre posiciones de juego y asociaciones con el rendimiento de sprint y de salto

El rugby se caracteriza por actividades intermitentes de alta intensidad que consisten en sprints, colisiones, aceleraciones, desaceleraciones y carreras a alta velocidad intercaladas con períodos de actividad y de recuperación de menor intensidad (Tiemey 2021). Las posiciones de juego en el rugby se pueden generalizar en delanteros (‘fowards’) y defensores (‘backs’), requiriendo cada uno de ellos perfiles físicos y antropométricos diferentes (Darrall-Jones 2015 y 2015, Zabaloy 2021) debido a sus diferentes exigencias del juego. Por ejemplo, aunque las tareas principales de los delanteros son ganar y retener la posesión del balón (generalmente en situaciones de contacto que involucran a varios jugadores), los defensores generalmente deben moverse rápido en el campo y evitar el contacto, lo que exige mayores niveles de aceleración y velocidad (Casserly 2020).

Los perfiles físicos contrastantes de las diferentes posiciones de juego del rugby han sido ampliamente documentados en la literatura (Darrall-Jones 2016, Delahunt 2013, Zabaloy 2021). Por ejemplo, los delanteros suelen ser más pesados, más altos y exhiben un mayor porcentaje de grasa corporal que los defensores (Darrall-Jones 2013 y 2016, Fontana 2015). Además, investigaciones previas (Darrall-Jones 2013) en jóvenes jugadores de rugby reportaron mayores velocidades de sprint para los defensores en comparación con los delanteros, en diferentes distancias divididas de 10 a 40 m, siendo la velocidad máxima (Vmáx) un factor discriminante entre las categorías de edad (Darrall-Jones 2013, Zabaloy 2021).

En cuanto a la fuerza, los datos publicados indican que los delanteros poseen mayores valores absolutos en comparación con los defensores, lo que puede explicarse en parte por su mayor masa corporal (BM) (Zabaloy 2021). Sin embargo, en general, la capacidad de fuerza, expresada en términos absolutos o relativos (normalizados a la BM), es esencial para el éxito del rugby union (Duthie 2006) porque su expresión y generación es crítica para situaciones de contacto y confrontación (Crewther 2009).

Más concretamente, la fuerza es una cualidad básica que afecta a numerosas habilidades físicas y técnicas, que suele evaluarse mediante el test de 1 repetición máxima (1RM) (Loturco 2021). En consecuencia, se informó que la fuerza relativa en el ejercicio de sentadillas (SQrel) es un factor discriminatorio para los velocistas y los jugadores de rugby (Loturco 2021), mientras que se encontró que 1RM en sentadillas (SQ) era significativamente diferente entre los defensores y los delanteros en atletas universitarios de rugby (La Mónica 2016). Siguiendo esta última evidencia, el déficit de fuerza (SDef), previamente definido y descrito como la diferencia (expresada en porcentaje) entre la fuerza producida cuando la resistencia es la máxima que se puede levantar (por ej., 1RM) y cualquier otro valor de fuerza alcanzado contra cargas de fuerza submáxima (Gonzalez-Badillo 1995, 2002 y 2017, Loturco 2021), parece ser otra variable crítica para analizar el rendimiento de los jugadores. Hasta la fecha, sólo Loturco y cols. (2021) informaron que los velocistas presentan un SDef más bajo (p <0.03) en comparación con los jugadores de rugby en un amplio rango de cargas (40-70% 1RM). Desde una perspectiva práctica, los niveles más bajos de SDef implican que un atleta puede usar mayores porcentajes de su habilidad contra cargas más ligeras (por ej., 40% 1RM) (Gonzalez-Badillo 2017, Loturco 2021). Por lo tanto, se puede esperar que los atletas con niveles más bajos de SDef también puedan aplicar mayores cantidades de fuerza contra su propio peso corporal (BM) (Loturco 2021).

De hecho, la capacidad superior de los velocistas para aplicar fuerza contra cargas más ligeras (en comparación con los jugadores de rugby) parece estar relacionada con su rendimiento superior en sprints y saltos (Loturco 2021). En este contexto, se puede suponer que en deportes donde las habilidades de sprint y salto son aspectos decisivos y discriminatorios (por ej., rugby) (Darrall-Jones 2016, Zabaloy 2021), el SDef también puede considerarse un factor relevante. La investigación en este sentido es esencial para comprender más profundamente la influencia de la fuerza máxima y sus parámetros derivados en el rendimiento del rugby (Loturco 2021). Ningún estudio ha examinado simultáneamente las diferencias en la fuerza máxima y el SDef en un rango de cargas y sus posibles asociaciones con diversas cualidades físicas en jugadores jóvenes de rugby. Por lo tanto, recientemente Santiago Zabaloy de la Universidad de las Flores (Argentina), llevó a cabo un estudio al respecto, cuyos objetivos de ese estudio eran dos: (a) comparar el rendimiento relacionado con la fuerza entre jóvenes delanteros y defensores y (b) examinar las correlaciones entre el SDef (del 40 al 90% RM [SDef40 a SDef90]), parámetros de fuerza (es decir, 1RM de SQ, SQrel), rendimiento de sprint y salto. Debido a que los backs suelen ser más rápidos que los forwards, los autores del estudio plantearon la hipótesis de que mostrarían niveles más bajos de SDef (Loturco 2021). Además, según investigaciones anteriores (Gonzalez-Badillo 2017, Loturco 2021), también se esperaría que el SDef se correlacionara negativamente con SQrel, la velocidad de carrera y la altura del salto vertical.

Cincuenta y siete jugadores masculinos de rugby (media ±SD: edad, 17.4±1.3 años) realizaron evaluaciones antropométricas y de composición corporal, tests de saltos verticales, sprint de 30 m, sentadillas (SQ) y press de banco (BP) en tests máximos de 1 repetición (1RM SQ y BP). Las diferencias en las variables evaluadas entre posiciones se analizaron a través de un t-test independiente. Se utilizó un coeficiente de correlación de Pearson para evaluar las relaciones entre las variables.

Se observaron diferencias significativas para las medidas antropométricas y de composición corporal y el rendimiento de salto y sprint entre posiciones (p <0.05; tamaño del efecto [ES]: 0.60–1.34), excepto para la velocidad de 5 m (p = 0.080; ES: 0.57). Los backs mostraron 1RM relativo más alto que los fowards en ambos ejercicios (p = 0.009 y p = 0,008; ES = 0.88 y 0.91, para SQ y BP, respectivamente). Además, los backs mostraron un SDef más bajo de 70 a 90% de 1RM (p <0.048) pero un SDef de pequeño a moderado no significativo contra cargas más ligeras en comparación con los forwards (50–60% 1RM). En general, el SDef en todas las cargas (r: -0.378 a -0.529) y 1RM SQ (r: 0.504 a -0.590) se relacionaron significativamente con el rendimiento de sprint.

Por lo tanto, los jóvenes jugadores de rugby que presentan menores magnitudes del SDef y un rendimiento superior en 1RM SQ tienden a ser más rápidos en los sprints lineales.

Aplicaciones prácticas

El presente estudio es el primero en analizar y comparar las diferencias en las características antropométricas y los parámetros derivados de la fuerza entre jóvenes backs y fowards. En general, se demostró que SQrel y SDef están estrechamente relacionados con una serie de medidas relacionadas con la velocidad y pueden diferenciar entre posiciones de juego. Se alienta a los entrenadores de rugby a utilizar este enfoque de evaluación y sus parámetros derivados junto con las medidas de fuerza más tradicionales (es decir, el valor de 1RM) para obtener una visión más completa de las características de fuerza de sus atletas. Además, los practicantes pueden considerar la implementación de estrategias de entrenamiento capaces de reducir la magnitud del SDef entre los jugadores de rugby porque esto probablemente resulte en una mayor capacidad para aplicar fuerza rápidamente contra cargas submáximas, lo que puede ser relevante para lograr velocidades de sprint más altas. La prescripción de ejercicios de fuerza realizados con cargas ligeras a moderadas movidas lo más rápido posible durante la fase concéntrica del movimiento puede ser una buena alternativa en este sentido. Se deben realizar estudios futuros para investigar los efectos de diferentes regímenes de entrenamiento de fuerza-potencia sobre el SDef evaluado a través de un amplio rango de cargas, así como para examinar las relaciones entre las variaciones en el SDef y el rendimiento de sprint.