¿Cuáles son las ventajas y desventajas que presenta la Bioimpediancia eléctrica (BIA)?

Publicado 26 de abril de 2021, 12:42

Francis Holway, MSc

Francis Holway, MSc

Nutrición Deportiva

Respondió 26 de abril de 2021, 13:02

Bioimpedancia eléctrica (BIA)

Los aparatos de bioimpedancia eléctrica (BIA) han ganado gran aceptación y cuestan entre 50 y 5 000 dólares, según sea su grado de complejidad. Por lo general, los de “monofrecuencia” son mucho más económicos que los de “multifrecuencia”. Una revisión sobre este tema rebasa los objetivos de este capítulo, pero pueden consultarse varias muy exhaustivas (NIH Consensus, 1996; Kyle, Bosaeus, et al., 2004).

La ventaja de la BIA radica en que puede medir rápido, con muy poco trabajo, puede tener un costo bajo y es fácil de transportar. No obstante, también tiene alguna desventaja. Con la BIA sólo se obtienen datos de masa magra y grasa, en comparación con las 40 variables cuantificadas con la antropometría. 

Sin embargo, el principal problema de la BIA es que la técnica para calcular el agua corporal total y por ende la masa magra (y, por defecto, la fracción de grasa) es muy errática, por lo que estos aparatos se los utiliza al final para estimar el porcentaje graso, no para medir la composición corporal

Una prueba muy sencilla ilustra lo anterior: se calcula un porcentaje graso con datos reales con este aparato y luego se repite el procedimiento con otros datos. El aparato de BIA solicita ciertos datos al programa que con- tiene, como sexo, edad, nivel de actividad física, peso (a menos que sea una balanza) y estatura. La variable que agrega el aparato es la impedancia al flujo de una corriente eléctrica débil a través del cuerpo (lo que se mide en realidad). Si se repite el procedimiento con otros datos, como 10 años menos, 5 kg menos, 5 cm de estatura más, ¡e incluso otro sexo!, el resultado de la máquina de BIA arroja un valor diferente al anterior. Esto significa que el aparato determina cuál es el porcentaje graso si se tuvieran edad, sexo, nivel de actividad física, peso y talla particulares, y no a partir de la resistencia o impedancia a través del cuerpo. El programa contiene una ecuación de regresión múltiple que calcula, pero en realidad el aparato de BIA no mide, o lo que mide influye en una sexta parte el resultado final. La consecuencia es que si un paciente gana masa muscular pero no grasa entre controles, el peso adicional se computa como un aumento de grasa también. En otro estudio, la investigadora Rodríguez-Bies cuantificó la pérdida de peso y los cambios de agua corporal con un aparato de BIA de multifrecuencia, en un grupo de remeros de élite en España (Rodríguez-Bies, et al., 2009). A pesar de que todos los remeros habían perdido en promedio 1.7 kg de peso corporal por la deshidratación de una sesión de entrenamiento en el calor del río Guadalquivir de Sevilla y sin beber nada, el aparato de multifrecuencia estimó incluso incrementos de agua corporal en algunos atletas.

En resumen, la idea original era buena (correlación entre agua corporal y resistencia al paso de una corriente eléctrica), pero representaba un gran margen de error, razón por la cual debió apuntalarse el resultado con “ayuda” de otras cinco variables para una ecuación de regresión múltiple, con la consecuencia de que se trata de un programa de estimación a partir de datos introducidos, y no una máquina para medir la composición corporal. Es deseable que en el futuro cercano este tipo de tecnología mejore y pueda medir en verdad la composición corporal.


Respuestas

Pablo A. Bosch

Pablo A. Bosch

Respondió 28 de abril de 2021, 13:20

He encontrado un articulo que puede aportar a esta cuestión, se llama

"Bioelectrical impedance analysis for body composition assessment:
reflections on accuracy, clinical utility, and standardisation" es de Ward y fue publicado en el 2018. 

En primera medida destacar como ha crecido el interes del tema en los ultimos años. Comparto una imagen del estudio

El análisis de impedancia bioeléctrica es un método extremadamente popular para evaluar la composición corporal. A pesar de su uso generalizado durante los últimos treinta años, su precisión y valor clínico aún se cuestionan. Con mayor frecuencia, las críticas se centran en su supuesta poca precisión absoluta y que diferentes analizadores de impedancia o ecuaciones de predicción no miden el cuerpo composición idéntica. Este estudio destaca que la magnitud de los errores asociados con los métodos de impedancia no son diferentes a los observados para los llamados métodos gold standar.