Influencia de la relación entre lo antropométrico y lo funcional en factores de riesgo
Publicado 9 de mayo de 2013, 23:54
Resulta interesante como aporte el capítulo 12 del libro “Antropométrica” de Kevin Norton y Tim Olds en cuanto a la jerarquización que se debiese tener con respecto a diversos parámetros antropométricos y su relación con salud, relegando a un segundo plano al registro de la masa corporal como factor predictor de enfermedades crónicas no transmisibles y otorgando mayor valor a la composición corporal y un tanto más a la distribución del tejido adiposo.
A pesar de que existe correlación entre determinados parámetros antropométricos y factores
de riesgo, en la década de los 90 se trato de minimizar su influencia, otorgando mayor valor a la capacidad y potencia aeróbica. Glenn Gaesser (1998) puso acento en la exagerada valoración que se le da al IMC, encontrando una relación más estrecha entre la capacidad aeróbica y factores de riesgo, en tanto que, Do Lee y col. (1999) fueron más allá y lo extendieron también hacia la composición corporal y la distribución del tejido adiposo mediante la medida del perímetro de cintura, también encontrando que, en comparación con los niveles de capacidad aeróbica, su valor es menor.
Pues bien, si lo funcional (capacidad y potencia aeróbica) están por sobre la forma y la estructura (antropometría), no hay que tomar estos parámetros por separado para conseguir una buena interpretación de los datos, sino que, establecer relaciones entre ellos ya que aunque se le asigne mayor valor a la capacidad o potencia aeróbica, igual el riesgo tiende a ser mayor en sujetos que ante valores similares en esos aspecto, presentan valores antropométricos considerados “poco saludables”.
Si revisan el articulo http://g-se.com/es/prevencion-y-rehabilitacion-cardiovascular/articulos/influencia-de-parametros-ventilatorios-sobre-variables-antropometricas-1516 se darán cuenta que la mayor correlación entre potencia aeróbica y variables antropométricas es del pliegue abdominal.