¿Cuáles son los efectos agudos del entrenamiento concurrente en la respuesta hormonal?

Publicado 3 de mayo de 2021, 13:06

Entrenamiento concurrente y respuesta hormonal

En los últimos años han surgido numerosos estudios que centran la atención sobre la respuesta hormonal del entrenamiento concurrente atendiendo al orden en la secuencia de capacidades intra-sesión (Rosa et al., 2015; Rezaee, Kahrizi & Hedayati, 2014; Schumann et al. 2013, 2014, 2015; Taipale & Häkkinen, 2013; Cadore et al., 2012; Eklund et al., 2015). Otros estudios lo han hecho comparando el entrenamiento concurrente en la misma sesión con el entrenamiento a solas de la fuerza y la resistencia (Ferdosi & Asad, 2012; Akbari, Mojtahedi, Mohammad, Movahedi & Fakhreddin, 2012; Mirghani, Agha-Alinejad, Azarbayjani, Mazidi & Mirghani, 2014). A partir de los resultados obtenidos algunos de estos estudios han tratado inferir, desde la respuesta hormonal, el potencial adaptativo sobre los cambios de composición corporal o mejora de la función neuromuscular.

Por ejemplo, Taipale y Häkkinen (2013) encontraron diferencias significativas en la respuesta hormonal post-ejercicio y durante la recuperación entre hombres y mujeres ante las diferentes combinaciones del entrenamiento concurrente. Según estos autores, dichas respuestas sugieren que la realización del entrenamiento de la fuerza antes que el entrenamiento de resistencia es un estímulo más potente para las respuestas hormonales, especialmente en los hombres, que la combinación contraria. Otros estudios posteriores (Schumann et al., 2014; Eklund et al., 2015) confirman estos datos al encontrar una respuesta aguda de la hormona de crecimiento significativamente mayor en el grupo de entrenamiento concurrente que realizó antes la fuerza que la resistencia en la misma sesión durante 24 semanas de intervención.

Otros estudios con sujetos entrenados en fuerza a nivel recreacional (Cadore et al. 2012b) y con deportistas entrenados de forma concurrente en resistencia y fuerza (Rosa et al. 2015) que realizaron entrenamientos de fuerza típicos de hipertrofia en combinación con entrenamientos de resistencia en bicicleta (Cadore et al. 2012b) y de carrera (Rosa et al. 2015) han mostrado un aumento de las concentraciones de testosterona solamente con el orden de la secuencia que comenzaba primero con el ejercicio de resistencia (ciclismo y carrera, respectivamente). Estos autores concluyeron que el entorno hormonal favorable sucedía cuando el ejercicio de resistencia precedía al ejercicio de fuerza.

Interesantemente, algunos estudios con sujetos obesos (Sheikholeslami-Vatani, Siahkouhian, Hakimi & Ali-Mohammadiet, 2015) o con sobrepeso (Rosa, Cruz, Mello, Fortes & Dantas, 2010) se han centrado en el efecto de diferentes secuencias de entrenamiento concurrente sobre la respuesta hormonal -testosterona, cortisol, testosterona/cortisol, leptina- tras periodos prolongados de entrenamiento, sin hallar diferencias significativas entre grupos experimentales en dicha respuesta. Otros estudios simplemente lo han hecho sobre el impacto hormonal de la leptina frente a una única secuencia de entrenamiento observando similares resultados (Emamdost et al., 2014).

Sin embargo, debido a las diferentes características de los protocolos de entrenamiento (semanas de entrenamiento, intensidad, volumen, etc.), de las características de los sujetos (edad, género, experiencia de entrenamiento, composición corporal), y de los procedimientos de medición en cada estudio, entre otros factores, los resultados son variados según la respuesta hormonal analizada (hormona de crecimiento, testosterona, cortisol, IGF-1, leptina), y por tanto no son concluyentes ni extrapolables a todas las situaciones o poblaciones. Además, independientemente de la respuesta hormonal que pudiera favorecer un entorno más o menos anabólico o catabólico según la secuencia en el orden intra- sesión, no se deben establecer relaciones causales entre la respuesta hormonal y la respuesta final provocada sobre la ganancia de fuerza e hipertrofia. De hecho, son muchos otros los factores y respuestas agudas que pueden acontecer simultáneamente y estar condicionando el estímulo final resultante, y por lo tanto la adaptación generada por el efecto global.