Curación en el músculo

Publicado 16 de abril de 2013, 12:20

Las lesiones del tejido muscular conllevan procesos de curación y reparación similares a los ya vistos respectos de los otros tejidos.

Inicialmente habrá hemorragia y edema, seguidos casi inmediatamente de fagocitosis. En unos pocos días hay una proliferación de sustancia fundamental y los fibroblastos empiezan a producir una matriz tipo gel que rodea el tejido conectivo, provocando la fibrosis y la cicatrización. Al mismo tiempo, se forman células mioblásticas en el área de la lesión que acaban por llevar a una regeneración de nuevas miofibrillas. Así es como empieza la regeneración de los tejidos conectivos y musculares

Las fibras de colágeno experimentan una maduración y se orientan siguiendo las líneas de fuerza de tensión de acuerdo con la ley de Wolff. La contracción activa del músculo es crucial para recuperar la fuerza de tensión normal y promover una correcta alineación del tejido conectivo cicatrizal (Prentice, 2001).

En la curación del tejido muscular ocurre una competencia entre dos procesos, la reparación y la regeneración.

Estos dos procesos compiten existiendo en la mayoría de los casos una ventaja de la reparación sobre la regeneración ya que este proceso es limitado en determinados tejidos, como el músculo, pero estudios y procedimientos recientes sugieren que puede inducirse un aumento del mismo para favorecer la curación y la calidad de la cicatrización. (Jarviven et al 2005; Zachazewski, 1996).

El proceso de regeneración es el que ya conocemos, en el cual al producirse la lesión ocurren los mecanismos que terminan formando una cicatriz de tejido conectivo, donde luego de formado el hematoma, en la fase de respuesta inflamatoria, se da paso a la proliferación de fibroblastos y la formación de matriz extracelular que darán forma al tejido cicatrizal. Éste sellará el defecto con una cicatriz de tejido conectivo con todas las características estructurales que ésta presenta; curándose el músculo con un tejido que no conserva las mismas características que el tejido muscular sano (Jarvinen, 1975).

Este adquiere las características mecánicas y físicas del mismo, por lo que debemos tener en cuenta en este caso que nos encontraremos con un tejido poco elástico y resistente dentro de una estructura elástica.

Por otro lado ocurre en forma paralela la regeneración del tejido muscular, este tejido regenerativo conserva las características y propiedades del tejido original y sus características mecánicas y físicas.

En el proceso de regeneración de los elementos contráctiles comienza con la activación de las células satélites. En adultos estas células están inactivas y se sitúan entre la lamina basal y el sarcolema de la fibra muscular (Mauro, 1961). En la producción de la lesión muscular se produce la ruptura de la lámina basal, esta ruptura activa la capacidad mitótica de estas células.

Luego de la fase aguda inflamatoria, donde se produce ruptura de capilares y producción de hematoma en el lugar de la lesión, dando lugar a la llegada de macrófagos producto de la liberación de citosina que los atraen, éstos comienzan su tarea fagocitando todo el tejido necrótico que se halla entre los extremos dístales y proximales de las fibras rotas (Robertson y cols., 1991)

También se ha observado que los macrófagos liberan factores de crecimientos específicos que estimulan la capacidad mitótica de las células satélites (Kuschel y cols., 2000). El final de la fase aguda y la disminución considerable de los macrófagos y leucocitos en el lugar de la lesión dan comienzo a la regeneración. Estudios histoquímicos indican que la fusión de los miotubulos requieren de un metabolismo aeróbico (Show, 1973).

Los mioblastos se fusionan entre si, para formar miotubulos, que a su vez se fusionan entre si para formar una nueva fibra muscular (Jarviven et al 2005)

Teniendo en cuenta estos dos procesos que ocurren en la curación muscular, regeneración y reparación, lo que nos interesa como rehabilitadores es conocerlos en forma detallada y tratar con los medios que tenemos a nuestro alcance (que desarrollaremos cuando desglosemos la rehabilitación de lesiones musculares), inducir y favorecer el proceso de regeneración sobre el de reparación para así mejorar en tiempo y calidad la cicatrización muscular. Por ejemplo la utilización de electroterapia y sus beneficios en la regeneración, los efectos de la movilización temprana, etc.

Referencias

1. Garrett WE. Muscle strain injuries. Am J Sports Med. 1996;24:S2- S8.

2. Järvinen M. Healing of a crush injury in rat striated muscle, 2: a histological study of the effect of early mobilization and immobilization on the repair processes. Acta Pathol Microbiol Scand. 1975;83A:269-282.

3.Järvinen Tero A. H., Teppo L. N. Järvinen, Minna Kääriäinen, Hannu Kalimo, and Markku Järvinen,Muscle Injuries Biology and Treatment. The American Journal of Sports Medicine, Vol. 33, No. 5.2005

4. Prentice, Willams, Técnicas de Rehabilitación en Medicina deportiva, 2da Edición, Paidotribo, 1999.

5. Snow MH. Metabolic activity during the degenerative and early regenerative stages on skeletal muscle. Anat Rec. 1973;176:185- 204.

6. Zachazewski, James. Athletic Injuries and Rehabilitation. Saunders company. 1996