Efectos de las vibraciones de cuerpo completo sobre el rendimiento en basquetbolistas
Publicado 14 de julio de 2013, 16:23
Las vibraciones siempre fueron parte de nuestra vida; en todos los cuerpos existe una determinada onda de vibración que puede ser transmitida de uno a otro por el contacto entre los mismos. La propia naturaleza nos muestra las vibraciones a través de los temblores, señalando que hay fenómenos en donde se produce la acumulación de energía, liberándose y generando ondas sísmicas. El hombre está acostumbrado a recibir las mismas a través del uso de herramientas o medios de transporte que vibran. Por otra parte todos los tejidos y órganos de nuestro sistema tienen una frecuencia de vibración específica, incluido el sistema muscular, tanto en reposo como en activación. [1]
A medida que aumentó su uso, también empezaron a acrecentar el número de investigaciones que se realizaban con las mismas, tratando de indagar acerca de los diferentes fenómenos que las WBV (“Whole Body Vibration”) inducían en el sistema Neuro-Muscular. En la última década aparecieron una gran cantidad de Investigaciones en campos muy diversos en donde se justifica su empleo por las mejoras generadas en el organismo de los seres vivos, frente a patologías como la Fibromialgia, la Esclerosis Múltiple y la Osteoporosis. [2, 3, 4]
En relación al rendimiento en el deporte ya se han demostrado sus efectos neurogénicos asociados posiblemente a respuestas similares a las que tendrían entrenamientos de resistencia intencionados en mejorar la TDF(Tasa de Desarrollo de la Fuerza), provocados posiblemente por factores asociados a la potenciación de la conducción cortical, el “input” de la motoneurona alfa, las tasas de disparo de las unidades motoras fásicas, la activación de ciertas vías reflejas y la disminución de umbral de activación para las unidades motoras de tipo II.
Efectos Agudos:
Cormie y col. sometieron a 9 sujetos a una sola serie de 30 segundos de vibraciones con una frecuencia de 30 hz y una amplitud de 2.5 mm en posición de “Squat”. Encontraron que los que se sometieron a las WBV, tenían valores más altos en el pico de fuerza, el pico de potencia y la altura del CMJ en relación al Grupo Control (GC) que hizo el mismo ejercicio pero sin vibraciones. Esto se observó inmediatamente finalizado el protocolo, pero también se halló que eran capaces de mantener estos valores más elevados durante el transcurso del tiempo posterior (5min post, 15min post, 30min post). [5]
Tomado de Cormie 2006.
Otro muy buen trabajo producido por McBride y col. encontró efectos agudos similares. Luego de realizar 6 series de “Squat” (3 bilateral y 3 unilateral) con una frecuencia de 30 hz y una amplitud de 3.5 mm, se pudieron encontrar mejoras significativas en la TDF y la MCV (Máxima Contracción Voluntaria), inmediatamente después, a los 8min post y a los 16 min post. Esto indica que según este trabajo las WBV pueden inducir el fenómeno de la PAP, aunque el mecanismo no esté del todo claro ya que no existieron modificaciones en el ratio Hmax/Mmax medida en el músculo Sóleo. Recordemos que mientras que la onda M se debe a la activación directa de los axones de la A-motoneurona del Sóleo, la onda H es la descarga del reflejo de la misma agrupación en respuesta a la aferencia ortodrómica. [6]
Efectos Crónicos:
Otro trabajo conducido por Fernández-Río se llevó a cabo durante la fase competitiva con jugadores de Básquetbol elite de España. Se seleccionaron 31 mujeres con el objetivo principal de indagar que respuestas existían posteriores a 14 semanas de WBV como ejercicio complementario a un programa de fuerza tradicional. El GC solo realizó el programa básico, mientras que el GWBV le añadió un entrenamiento vibratorio de 2 veces a la semana, con una amplitud de 4mm y una frecuencia variable. Antes y después de la aplicación del programa se midió SJ, CMJ, Saltos continuos en 15 segundos y Potencia de piernas en Sentadilla mediante un encoder. No se encontraron diferencias significativas entre ambos grupos, incluso el grupo control obtuvo mayores incrementos en el SJ, CMJ y los Saltos continuos. Por lo tanto 14 semanas de vibraciones mecánicas no parecen tener beneficios sobre la producción de fuerza en jugadoras de elite. [7]
Tomado de Fernandez-Río 2010
El objetivo del último estudio llevado a cabo por Colson y col. fue investigar la influencia de 4 semanas de WBV añadido a la formación tradicional en jugadores de baloncesto. Dieciocho jugadores de baloncesto de alta competencia femenina y masculina fueron asignados al azar a un grupo de GWBV y un GC. Los miembros de GWBV fueron sometidos adicionalmente a sesiones realizadas 3 veces a la semana durante 20 minutos en una plataforma vibratoria (10 ejercicios sin carga para miembros inferiores, 40 Hz, 4 mm). Las pruebas se realizaron antes y después del período de 4 semanas incluyendo: evaluación de la Fuerza extensora en Isométrica, Altura del salto vertical y Sprint en 10 m. La fuerza isométrica máxima de los extensores de la rodilla aumentó significativamente (p <0.001) al igual que la altura del SJ (p <0,05), mientras que el rendimiento del salto CMJ, el DJ, Saltos continuos en 30 segundos y el rendimientos en 10 metros lisos se mantuvo sin cambios. Los resultados indicaron que el uso del entrenamiento vibratorio puede ser eficaz para mejorar algunas variables a corto plazo. [8]
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.
1) Barry D, Cole N. (1988). Fluid mechanics of muscle vibrations. Biophysical J. 53: 899905
2) Eduard A-G, Padilla J, Moras G, Lázaro C, Fernández-Solà J. (2008). Six Weeks of Whole-Body Vibration Exercise Improves Pain and Fatigue in Women with Fibromyalgia. The journal of alternative and complementary medicine. Volume 14, Number 8, pp. 975–981.
3) Jackson K.J, Merriman H.L, Vanderburgh P.M. (2008). Acute effects of whole vibration on lower extremity muscle performance in persons with multiple sclerosis. Journal Neurologic Physical Therapy. 32, 171-178.
4) Fjeldstad C, Palmer I, Bemben M, Bemben D. (2009).Whole-body vibration augments resistance training effects on body composition in postemenopausal women. El Sevier. Maturitas 63 , 79–83,
5)Cormie P, Deane R, Triplett N.T , MC Bride J.M . (2006).Acute effects of whole body vibration on muscle activity, strength and power. J. Strength Cond. Res. 20:257–261.
6) Mc Bride J.M, Nuzzo J, Dyane A, Israetel M, Nieman D, Triplett N.T. (2011). Effect or an acute bout of whole body vibration exercise on muscle force output and motor neuron excitability. J. Strenght Cond. Res. Volumen 24, Number 1, January.
7)Fernandez-Rio J, Terrados N, Fernandez-Garcia B, Suman OE. (2010). Effects of vibration training on force production in female basketball players. J Strength Cond Res 24(5): 1373–1380.
8) Colson S.S, Pensini M, Espinosa J, Garrandes F, Logros P. (2010). Whole body vibration training effects on the physical performance of basketball players. J Strenght Cond Res. 24(4): 999-1006.
Stefano Benítez G-SE 2013.