Ejercicio Intermitente: Respuestas fisiológicas al variar el tiempo de trabajo y pausa.

Publicado 12 de agosto de 2013, 12:27

Ejercicio Intermitente: Respuestas fisiológicas al variar el tiempo de trabajo y pausa.

En esta entrada de blog, analizamos un tema del entrenamiento intermitente que se relaciona a la duración del trabajo y pausa y sus consecuencias fisiológicas de extender o reducir sus duraciones.

Price M. realizó un par de estudios muy parecidos a los de Christmass respecto a los protocolos utilizados. Uno de estos estudios de Price (2005), se examinaron los efectos de distintas duraciones de trabajo y pausa sobre el ejercicio intermitente y un subsiguiente rendimiento de una carrera hasta el agotamiento. Para ello, 8 hombres adultos (edad: 24±2 años; peso corporal: 79,4±7,0 kg; altura: 177±5 cm; 55,7±8,5 ml∙kg-1∙min-1 VO2máx) se sometieron a protocolos de ejercicio intermitente que implicaban turnos de carrera a un % de la velocidad en VO2máx (VAM) y alternado con recuperaciones en forma pasiva. Cada protocolo duraba 40’ y cada turno de ejercicio implicaba una relación de trabajo:pausa de 1:1,5 (la misma relación que utilizó Christmass en sus estudios, como vimos en el anterior blog). Así, se desarrolló un protocolo corto (6”:9”), un protocolo medio (12”:18”) y un protocolo largo (24”:36”). La velocidad de trabajo durante los protocolos intermitentes era equivalente al 120% de la VAM y la duración total de trabajo fueron idénticas para los 3 protocolos. En consecuencia, cada protocolo fue igualado en intensidad y en trabajo total realizado. Luego de cada protocolo, y después de tomar muestras de sangre a cada sujeto, inmediatamente se realizó una carrera (en la misma cinta ergométrica) hasta la fatiga volitiva a una velocidad equivalente al 150% de la VAM. El tiempo y la distancia alcanzados durante esta carrera final, fueron registrados. Los % de utilización de lípidos y CHO fueron calculados a partir del método basado sobre valores de RER (no se contabilizan las proteínas). Las características de los sujetos se observan en la Tabla 1. Los resultados se observan en las Figuras 1, 2, 3, 4 y 5.

Tabla 1. Características fisiológicas de los sujetos y las velocidades de los protocolos intermitentes.

Figura 1. Frecuencia cardíaca en reposo, durante el ejercicio intermitente de diferentes protocolos y después de completar un rendimiento de un test de carrera final (TR). Los valores son promedio de los 40’ de ejercicio intermitente. IC: intermitente corto (6”:9”); IM: intermitente medio (12”:18”); IL: intermitente largo (24”:36”)

Figura 2. Consumo de oxígeno (VO2) en reposo y durante el ejercicio intermitente de diferentes protocolos. Los valores son promedio de los 40’ de ejercicio intermitente. * Significativamente diferente del protocolo intermitente corto (efecto principal por el protocolo): P < 0.05). IC: intermitente corto (6”:9”); IM: intermitente medio (12”:18”); IL: intermitente largo (24”:36”)

Figura 3. Cociente respiratorio en reposo y durante el ejercicio intermitente. * Significativamente diferente de los protocolos intermitentes corto y medio (efecto principal por el protocolo): P < 0.05); gasto energético a los 5’ y al final del ejercicio intermitente; concentración de lactato sanguíneo en reposo y durante el ejercicio intermitente, y después de la carrera final (RT). * Significativamente diferente del protocolo intermitente medio (efecto principal por el protocolo): P < 0.05). En las llaves se observan los % de diferencia entre los distintos protocolos. IC: intermitente corto (6”:9”); IM: intermitente medio (12”:18”); IL: intermitente largo (24”:36”).

Figura 4. Concentración de glucosa plasmática pre- y post-ejercicio de 40’ de trabajo intermitente de diferentes protocolos. Hubo un efecto significativo entre los valores pre- y post-ejercicio (P < 0.05).

Figura 5. Utilización de CHO (hidratos de carbono) durante el ejercicio intermitente. Las diferencias (deducciones) entre los distintos protocolos, se detallan en las llaves. IC: intermitente corto (6”:9”); IM: intermitente medio (12”:18”); IL: intermitente largo (24”:36”).

Tabla 2. Datos de la prueba de rendimiento de carrera final hasta el agotamiento al 150% de la VAM para los protocolos corto, medio, y largo (valores promedios±). La FC y el lactato sanguíneo son valores del final del ejercicio.

En este estudio de Price se pudo observar que después de 40’ de ejercicio intermitente, la intensidad promedio del ejercicio fue mayor durante el protocolo largo que en el corto y medio (IC, 54.9+8.1%; IM, 59.0+8.4%; e IL, 68.4.2+9.3%, P < 0.05). La concentración de lactato a los 10’ fue más alta en el protocolo largo y en el protocolo medio, que en el protocolo corto.

En otro estudio del mismo autor, realizando un protocolo de 8’ de ejercicio intermitente utilizando un formato corto (6”:9”) y otro largo (24”:36”) seguidos ambos por una carrera hasta el agotamiento en la misma velocidad de carrera (120% del VAM), podemos observar la concentración de lactato sanguíneo para ambas pruebas en reposo, durante el ejercicio intermitente, y post-rendimiento que se muestra en la figura 3b. La significancia fue observada tanto para el tiempo como los efectos principales de la prueba (P<0.05), pero no para la interacción (P<0.05). La concentración de lactato sanguíneo aumentó desde el reposo (IC: 0.87 mmol·l-1; IL: 0.97 mmol·l-1) a los 5 minutos de ejercicio (IC: 3.54 mmol·l-1; IL: 4.74 mmol·l-1). La concentración de lactato sanguíneo en 20 minutos fue de 3.94 mmol·l-1 y 6.34 mmol·l-1 para el protocolo corto y largo, respectivamente (efecto principal para la prueba, P<0.05). Al final de la carrera de rendimiento, los valores fueron similares en ambas pruebas (IC: 6.99 mmol·l-1; IL: 7.58 mmol·l-1; P<0.05). En ese mismo estudio de Price, también se observó que las percepciones de esfuerzo fueron mayores a lo largo del ejercicio para el protocolo largo que para el protocolo corto de ejercicio (16.6 y 15.1, en 20 minutos, respectivamente; P <0.05) y se correlacionó con el lactato sanguíneo (r = 0.43). Con lo cual, se observa una vez más que el intervalo largo de ejercicio intermitente provoca un mayor estrés fisiológico, el cual también es percibido subejtivamente.

El intercambio respiratorio (RER) fue más alto durante el protocolo largo que durante el protocolo medio y corto. Allí, se observó también que el ritmo en el cual los CHO son utilizados fue más rápido durante el protocolo largo. La concentración de glucosa plasmática fue más alta en el protocolo largo y medio que en el protocolo corto después de 40’ de ejercicio intermitente, como se vio en estudios previos (Christmass y Essén). Una explicación posible de este aumento en la glucosa puede ser la mayor tasa de utilización de los CHO durante las duraciones de ejercicio más largas, aumentando la liberación de glucosa hepática en un intento de alcanzar una homeostásis de glucosa en músculo y sangre. También puede deberse a una mayor liberación de catecolaminas por un aumento de la intensidad del ejercicio. No se observaron diferencias entre los tiempos de la prueba final de carrera hasta el agotamiento entre los 3 protocolos. Se ha encontrado una relación significativa (r=-0.56, P < 0.05) entre la glucosa plasmática post-ejercicio y el tiempo de rendimiento en la carrera final hasta el agotamiento, al igual que entre la duración del rendimiento de esa carera y la FC (r=-0.50; P < 0.05). Así, estos resultados muestran que 40’ de ejercicio intermitente que implican duraciones largas (24”:36”) y medias (12”:18”) de trabajo y pausa, provocan mayor estrés fisiológico y mayor utilización de CHO que la misma cantidad de ejercicio realizado con una duración de trabajo y pausa más corto (6”:9”). Es decir, esto nos puede ayudar a la hora de programar este tipo de ejercicios con sujetos que necesitan un manejo de su peso corporal y/o mejorar su fitness en general.


Referencias

  1. Price M., Halabi K. The effects of work-rest duration on intermittent exercise and subsequent performance, J Sports Sci., Volume 23, Number 8, pp. 835-842 (2005).
  2. Essen B, Kaijser L. Regulation of glycolysis in intermittent exercise in man. J Physiol(Lond) Aug; 281: 499-511. 1978.
  3. Essen, B. Studies on the regulation of metabolism in human skeletal muscle using intermittent exercise as an experimental model. Acta Physiol Scand Suppl. 454: 1-32. 1978.
  4. Essen, B. Glycogen depletion of different types in human skeletal muscle during intermittent and continuous exercise. Acta Physiol Scand 1978; 103:446.
  5. Christmass M.A., Dawson B., Passeretto P., Arthur P.G. A comparison of skeletal muscle oxygenation and fuel use in sustained continuous and intermittent exercise. Eur J Appl Physiol Occup Physiol, Oct 1999; 80(5): 423-35.
  6. Christmass M.A., Dawson B., Arthur P.G. Effect of work and recovery duration on skeletal muscle oxygenation and fuel use during sustained intermittent exercise. Eur J Appl Physiol Occup Physiol, Oct 1999; 80(5): 436-47.
  7. Price M, Moss P. The effects of work:rest duration on physiological and perceptual responses during intermittent exercise and performance. J Sports Sci. 2007 Dec; 25(14):1613-21.