Ejercicio, salud neuronal y capacidad cognitiva

Publicado 6 de octubre de 2021, 21:36

Ejercicio, salud neuronal y capacidad cognitiva

-Los mecanismos que subyacen a la función protectora del ejercicio contra el deterioro cognitivo no se comprenden bien, aunque existen varias hipótesis:

1.-Hipótesis de la neurogénesis: el ejercicio provoca una regulación positiva de factores llamados neurotrofinas que influyen directamente en la neurogénesis y la neuroplasticidad.

2.-Hipótesis vascular: las deficiencias en la función de los vasos (desde deficiencias en las grandes arterias centrales hasta los capilares cerebrales), afectan a la salud neuronal y, por tanto, la capacidad cognitiva.

-Las intervenciones de EJERCICIO CARDIORRESPIRATORIO mejoran la función vascular en las grandes arterias centrales y en la circulación periférica. Efectos dependientes de múltiples factores: Frecuencia, Volumen, Intensidad, modo...es decir, dosis.

-El ejercicio posee beneficios en la reducción de la rigidez arterial central y está inversamente asociada con la aptitud cardiorrespiratoria o el VO2máx.

-Los niveles elevados de rigidez arterial pueden revertirse mediante intervenciones de EJERCICIO CARDIORRESPIRATORIO de intensidad moderada a corto plazo en esta población (Tanaka et al., 2000; Yoshizawa et al., 2009). Pero, ¿puede haber un umbral de frecuencia y volumen de ejercicio de resistencia necesario para la prevención de los cambios asociados con la edad?

*Shibata et al. 2018: 4-5 d/s, 30´para prevenir los cambios asociados con la edad en la rigidez arterial central.

*Ashor et al. 2014: el ejercicio cardiorrespiratorio de mayor intensidad resultó en una menor rigidez arterial central en adultos. Ojo: NO todos las modalidades de ejercicio tienen los mismos efectos sobre la rigidez arterial central (ni es aplicable a toda la población por igual). La mayoría de los estudios se centran en: caminar, correr o bicicleta, como el modo de ejercicio principal al evaluar el impacto sobre la rigidez arterial. Los adultos sanos que participan en otras modalidades como nadar o remar, también muestran niveles reducidos de rigidez arterial relacionada con la edad en comparación con los adultos sedentarios.

-Una sola sesión de EJERCICIO conduce a cambios considerables en las vías metabólicas, cardiovasculares e inmunes (Contrepois et al., 2020; Egan y Zierath, 2013; Pedersen y Hoffman-Goetz, 2000; Whyte y Laughlin, 2010). Importante: ¡regularidad!

-Y, ¿beneficios psicológicos?: pueden afectar a la cognición independientemente de las adaptaciones vasculares. Ansiedad y/o depresión: asociada con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular y demencia. Ejercicio: reducción del estrés psicosocial, y por tanto, beneficios indirectos sobre la función cognitiva.

-Junto con las mejoras en la distensibilidad arterial, el EJERCICIO CARDIORRESPIRATORIO mejora la función del endotelio vascular en los vasos sanguíneos periféricos. En la circulación periférica, el ejercicio aumenta la síntesis, regulación y señalización de óxido nítrico (NO), mejora la vasodilatación mediada por prostaglandinas y disminuye el estrés oxidativo y la inflamación (¡importante en personas con patologías!)

-Mayor aptitud cardiorrespiratoria asociada con marcadores más bajos de estrés oxidativo. Reducción del estrés oxidativo o aumento de las vías antioxidantes: pueden ser un mecanismo subyacente por el cual el ejercicio mejora la regulación del flujo sanguíneo cerebral a través del aumento de la biodisponibilidad del NO.