El Entrenamiento en el Rugby Femenino

Publicado 2 de julio de 2013, 12:37

AUTOR: Juan Casajús.

Todos los integrantes del Staff técnico, y en especial cuando hay preparador físico, deben tener una visión a mediano y largo plazo. La formación motriz de las jugadoras en Argentina, plantea un desafío que incluye cantidad y calidad de estímulos.

En el Club las diferentes capacidades físicas (velocidad, fuerza, resistencia y otras) deben ser mejoradas a través de un entrenamiento sistemático, consciente y supervisado. El rugby argentino actual, en todos los distantes puntos geográficos, imita lo realizado en otros países y permite paulatinamente que la preparación física haga su gran aporte a un juego ágil, veloz y sobretodo,dinámico. El poco tiempo de competencia anual para la mayoría de las jugadoras de rugby, hace que las jugadoras deban prepararse lo mejor posible para dos objetivos fundamentales: evitar lesiones y poder jugar en el mejor nivel posible todo el año.

La coordinación y planificación previa con los responsables técnicos garantizan un mejor aprovechamiento de las sesiones de entrenamiento y una mejora para las jugadoras, y sobre todo para el que debe ser el mayor beneficiario: el equipo.

Esto nos indica que tanto en los entrenamientos en el Club, como en los trabajos individuales y los estímulos de sobrecarga en gimnasio, debe imperar una correcta planificación.

Las cargas de los trabajos deben alternarse de forma que se complementen y optimicen entre ellas, dejando siempre lugar al descanso, a la recuperación y a la recarga energética a través de los alimentos. Abordaremos algunos ejercicios para una valencia física como la coordinación y/o agilidad, dependiendo de la bibliografía de referencia. Dicha cualidad física, de difícil puesta en marcha por las mujeres, garantiza mejoras de forma rápida.

En los ejercicios descriptos, cada jugadora debe saber previamente el movimiento del ejercicio. Pueden usar los ejercicios en forma de competencia. Son ejercicios de acondicionamiento específicos y las pausas deben ser incompletas. Para completar las series, se pueden usar los ejercicios con toma de decisiones. Los ejercicios los pueden empezar de distintas posiciones iniciales (de pie, acostadas, rodilla al piso, etc.). Recordar en cambio en el sentido del ejercicio y que los ejercicios no deben durar más de 10 segundos.

El esquema de ejercicios se puede ver en http://es.scribd.com/doc/111180432/2012SimposioRugbyFemeninoCasajusPDF

Ejercicio 1.

El ejemplo es 10, 15, 20 y 25 pero pueden ser otras distancias. Las jugadoras corren hacia adelante y regresan hacia atrás a cada cono.

Ejercicio 2.

Esquina de cuatro colores. Una distancia de 5 – 10 metros. La jugadora parada en el medio. A la señal, la jugadora toca el color y vuelve al medio. En cada cono puede sólo tocar, hacer una flexión de brazos,realizar un pase al entrenador, etc.

Ejercicio 3.

En un cuadrado de 5 - 10 metros de largo, las jugadoras corren hacia delante alrededor del cono exterior y regresan por dentro del cuadrado, luego corren por afuera y regresan por dentro del cuadrado. Variantes: los inicios, tackles, saltos, etc.

Ejercicio 4.

Realizar una T con conos, con una separación de 5 metros. Correr hacia delante y trabajar la toma de decisión a derecha y/o izquierda según señales. Luego cambiar de lado y regresar al inicio. Ver variantes.

Ejercicio 5.

Separación de conos en 5 metros.La jugadora corre hacia adelante, regresa hacia atrás y elije un lado.Es muy bueno si una compañera lo hace enfrentada en acción de espejo.

Todos los entrenamientos deben estar basados en supuestos reales y buscando objetivos posibles de alcanzar.

Ahora bien, hay que tener en cuenta que si el esfuerzo continúa sin que la jugadora de Rugby haya descansado del esfuerzo anterior, el nivel funcional desciende. Sólo cuando los descansos y la alimentación son adecuados, el organismo asimila la actividad realizada, entra en fase de supercompensación y la capacidad funcional aumenta.

Las aplicaciones en forma sistémica de las cargas de entrenamiento en el Rugby producen una serie de procesos adaptativos a nivel biofuncional, siendo algunos apreciables a simple vista y se constatan observando a las jugadoras (por ejemplo la frecuencia cardíaca y la frecuencia respiratoria).

Otros son internos y se aprecian con evaluaciones de laboratorio.

Trabajo presentado en el Simposio Nacional de Rugby Femenino (Tucumán, Argentina). Octubre de 2012.