¿Qué es realmente el entrenamiento funcional?

Publicado 7 de agosto de 2013, 8:08

¿Qué es realmente el entrenamiento funcional?

Prof. Manuel de Diego Moreno, titular de Biomecánica y Teoría del entrenamiento (University of Wales).


ORIGENES

Desde hace unos año estamos viviendo la aparición constante de nuevas tendencias dentro del área de la salud y el fitness. Unas pocas nacen desde originales perspectivas en base a las modernas teorías del entrenamiento y la planificación, aunque la gran mayoría tienen su origen en clásicos métodos de entrenamiento que son adaptados a los nuevos materiales y a las actuales expectativas de los usuarios. De estas adaptaciones surgen tendencias como el ciclo indoor, body combat, body pump, entrenamiento en suspensión, Crossfit® , Glidding®, etc.

Al igual que estas modalidades, el entrenamiento funcional se crea a partir de métodos de entrenamiento clásicos modificados a las nuevas necesidades, podríamos decir que vivimos una época de actividad física “retro”, recuperando las viejas glorias de los sistemas de entrenamiento, y convirtiéndolos, en base a las ciencias del deporte, en unidades deportivas más comerciales y efectivas. Si somos críticos podemos ver como el famoso entrenamiento en suspensión, comercializado principalmente por la marca TRX®, es muy similar a los entrenamientos que hacen los gimnastas deportivos; o que el ciclo indoor, no es más que una adaptación del ciclismo y MBT; el Crossfit® es tremendamente parecido al sistema de entrenamiento de los halterófilos; y así podríamos seguir con la gran mayoría de las nuevas tendencias.


ENTRENAMIENTO FUNCIONAL

Así que, ¿qué es el entrenamiento funcional? Pues podríamos decir que es la unión de un conjunto de sistemas de entrenamientos que ya existían individualmente, pero que nadie se había planteado usar de manera conjunta y con objetivos de mejorar de manera completa las cadenas cinéticas humanas. El entrenamiento funcional se basa principalmente en el principio del entrenamiento de Unidad Funcional, que dice: “El entrenamiento tiene que ser considerado como un todo único que repercute o se aplica a la persona en su globalidad: física, psíquica, intelectual, etc. Hay que considerar que el organismo funciona como algo inseparable. Cada órgano, aparato y sistema están correlacionados con el otro. De aquí la importancia de prestar atención al desarrollo de los distintos sistemas circulatorio, respiratorio, endocrino, alimentación y de movimiento. Atendiendo a la unidad del deportista y el trabajo a desarrollar, esto nos va a llevar a los otros principios del entrenamiento” (Manso, 1996). Con esta definición podemos entender que la mejora de un gesto deportivo o una acción cotidiana, no sólo depende de mejorar de manera analítica en una maquina la musculatura implicada, si no que es también fundamental entrenar las cadenas cinéticas de manera completa, ¿cómo si no podríamos desarrollar la coordinación intermuscular?. Por ello, en el entrenamiento funcional se deben orientar los ejercicios a gestos y movimientos globales, en cadenas completas, y lo más parecidos a los movimientos reales. Buscaremos también el entrenamiento en inestabilidad, con objetivo de mejorar mecanismos de protección articular (reflejo miotático y propiocepción) que ayuden a la prevención de lesiones.

Para mí no hay una opinión más esclarecedora sobre si es mejor entrenar de manera funcional o analítica, que la expresada por dos gigantes del entrenamiento, Francisco Seirulo y Ángel Cappa en 2007:

“A mí los jugadores muchas veces me dicen: ‘Oye, Paco, ¿por qué no entrenamos la velocidad?’. Y les contesto que eso lo entrenamos todos los días, porque el fútbol es eso: velocidad, aceleración... no correr sin más, sino adaptarte a correr respecto al balón y al rival. Tocar el balón con la velocidad adecuada y hacia donde tú deseas.”

En conclusión, el entrenamiento funcional se basa en entrenar de manera “real” lo que quiero mejorar. Si quiero mejorar el salto, no me vale sólo con trabajar cuadríceps en prensa y gemelos con barra, ¡¡tengo que saltar!!, como si no el sistema neuromotor va a saber como coordinar la contracción de los diferentes músculos, el timing y fuerza de cada contracción,… es imposible. Entrenad lo que queráis realizando los gestos específicos a mejorar, ese es el secreto de la efectividad del entrenamiento funcional.