¿Cómo impacta el desentrenamiento de sobrecarga en la fuerza?

Publicado 19 de marzo de 2021, 11:17

Sebastián Del Rosso, PhD

Sebastián Del Rosso, PhD

Biología del Ejercicio

Respondió 19 de marzo de 2021, 14:05

El cese del entrenamiento con sobrecarga o la reducción en el volumen, la intensidad o la frecuencia del entrenamiento de la fuerza por un cierto período de tiempo se denomina desentrenamiento. El entrenamiento de la fuerza puede detenerse o reducirse debido a una lesión o puede ser una parte planificada del plan anual de entrenamiento (Kraemer, 2000). Es importante conocer las adaptaciones básicas que tienen lugar en el sistema neuromuscular durante el desentrenamiento para diseñar un programa óptimo para mejorar el rendimiento y mantener la fuerza y la potencia durante estos períodos.

El desentrenamiento luego del entrenamiento de la fuerza deriva en adaptaciones funcionales y estructurales en el sistema neuromuscular. Estos cambios tienen la dirección opuesta a aquellas resultantes del entrenamiento de la fuerza. Los primeros estudios en este campo indicaron que cuando el entrenamiento cesa por completo o se reduce drásticamente, la fuerza declina a una tasa menor que la tasa a la que se incrementó debido al entrenamiento (McMorris, 1967; Waldman, 1969). En la mayoría de las instancias, el cese completo del entrenamiento de la fuerza resulta en una declinación inmediata de la fuerza. En general, un corto período de desentrenamiento resulta en una reducción en la fuerza, aunque la magnitud de la reducción es variable. Sin embargo, reducción de la fuerza con el desentrenamiento, será mayor que el nivel de fuerza previo al período de entrenamiento. La magnitud y el curso temporal de las adaptaciones neuromusculares durante el desentrenamiento están influenciadas por el programa precedente de entrenamiento, por la historia de entrenamiento de cada individuo o atleta, por la cantidad y tipo de actividades físicas utilizadas durante el desentrenamiento y por la duración del período de desentrenamiento (Kraemer and Hakkinen, 2000). Períodos de desentrenamiento de mayor duración (hasta 30 semanas) también resultan en una reducción de la fuerza; en general, la fuerza luego de este período es mayor que el nivel de fuerza previo al período de entrenamiento. Ishida, Moritani & Ioth (1990) reportaron una rápida reducción en la fuerza durante un período de desentrenamiento, seguida de una declinación más lenta en la fuerza. También se ha reportado que la fuerza isométrica máxima declina a la misma tasa (0.3% por día) a la cual fue ganada con entrenamiento isocinético (Narici, 1989).

Conjuntamente con la información disponible tanto con períodos de desentrenamiento a corto plazo (2-4 semanas) como a largo plazo, indica que en general se observa una reducción en la fuerza, pero que esta pérdida es variable en cuanto a su magnitud (Fleck, 2004). La tasa de reducción en la fuerza puede depender, en parte, de la duración del período de entrenamiento previo al desentrenamiento, del tipo de test utilizado y del músculo específico examinado. El desentrenamiento subsiguiente al entrenamiento con sobrecarga (en sujetos previamente desentrenados) deriva en una reducción de la activación voluntaria máxima de los músculos que sufren el desentrenamiento (Figura 17). Sin embargo, la reducción de la electromiografía máxima no necesariamente se produce durante la primera semana del desentrenamiento sino probablemente durante las primeras 2-4 semanas.

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