Potencia y eficiencia durante el cicloergómetro en 3 posiciones distintas: decúbito supino, reclinado y erguido

Publicado 11 de agosto de 2021, 14:23

Potencia y eficiencia durante el cicloergómetro en 3 posiciones distintas: decúbito supino, reclinado y erguido

El ciclismo es uno de los métodos más comunes para evaluar y promover el fitness cardiorrespiratorio en los deportes recreativos, así como en la rehabilitación y la práctica clínica (Garber y cols., 2011; American College of Sports Medicine y cols., 2018). Los tests de ejercicio cardiopulmonar (CPET) juegan un papel importante en la evaluación de la capacidad física y la obtención de información útil de diagnóstico y pronóstico clínico (Guazzi y cols., 2012, 2016; Arena y cols., 2020) en pacientes con enfermedades cardiovasculares y pulmonares. Los resultados de la prueba de ejercicio cardiopulmonar se utilizan para prescribir intensidades de entrenamiento adecuadas para estímulos de entrenamiento apropiados (Pedersen y Saltin, 2015) o para evaluar la efectividad de las intervenciones de ejercicio, especialmente en entornos de investigación.

El ciclismo en decúbito o incluso en decúbito supino son alternativas de uso frecuente al ciclismo en posición vertical estándar (comparación en la Figura 1), por razones de seguridad y para evitar movimiento que interfieran en los electrocardiogramas. Al medir la potencia en vatios (W), la cicloergometría proporciona una solución teórica para calificar los resultados entre diferentes variantes de pruebas. Sin embargo, la transferibilidad limitada de una posición a otra (Ray y Cureton, 1991; Bonzheim y cols., 1992) debe considerarse utilizando los resultados del CPET como base para diagnósticos clínicos o de rendimiento. Para proporcionar recomendaciones de entrenamiento adecuadas, también se debe tenerse en cuenta la posición en la bicicleta, especialmente si las posturas de entrenamiento y prueba en el ergómetro son diferentes.

Se ha demostrado en varias investigaciones que la postura en la bicicleta influye en los resultados circulatorios y metabólicos y, por lo tanto, también en el rendimiento del ciclismo (Faria y cols., 2005). Una de las principales razones de las diferencias entre el ciclismo en posición vertical y supina parece ser la distancia vertical entre los músculos activos y el corazón, que altera el efecto gravitacional y, por lo tanto, influye en el retorno venoso, el gasto cardíaco y la presión de perfusión en los músculos activos (Leyk y cols., 1994; Fitzpatrick y cols., 1996; Egaña y cols., 2010).

En la práctica clínica, se utilizan habitualmente posiciones de ciclismo especialmente en decúbito; sin embargo, la interpretación de los resultados aún está en debate. Por lo tanto, recientemente Anja Wehrle de la University of Freiburg (Alemania), llevó a cabo un estudio al respecto donde el objetivo de dicha investigación fue comparar la eficiencia metabólica y ventilatoria, así como las estrategias de respiración durante el ciclismo en tres posturas de trabajo comunes [erguido, recostado (inclinado hacia atrás 40°) y supino] para determinar cómo las posibles diferencias y resultados son mejores evaluados y procesados para diagnósticos clínicos adecuados y prescripciones de entrenamiento.

Los autores esperan que la inclinación hacia atrás dé lugar a valores máximos más bajos y potencias submáximas más bajas, según la literatura. Se proporcionarán nuevos hallazgos al comparar la eficiencia en las tres posiciones de ciclismo mencionadas, que se espera que se reduzca cuanto más se incline la posición hacia atrás, lo que puede resultar en un aumento de los valores de VO2 submáximos con potencias submáximas más bajas.

Dieciocho sujetos sanos (edad: 47.2±18.4 años; 10 mujeres, 8 hombres) participaron en el estudio y cada uno completó tres pruebas de cicloergómetro incrementales hasta el agotamiento en posición vertical, reclinada (40°) y supina. Se analizaron el intercambio de gases, la frecuencia cardíaca (FC) y las concentraciones de lactato y posteriormente se calculó la eficiencia.

Las sesiones de prueba se realizaron en orden aleatorio dentro de un período de 2 semanas. El ciclismo vertical dio como resultado valores máximos significativamente más altos [potencia, consumo de oxígeno (VO2), FC], así como el rendimiento en los umbrales de lactato y ventilación en comparación con las posiciones recostadas o supinas. La curva del VCO2/VO2 y la eficiencia ventilatoria (curva VE/VCO2) no se vieron afectadas por la postura. La eficiencia del trabajo aeróbico (curva VO2/P) y la eficiencia bruta (GE) difirieron significativamente entre las posturas. Por lo tanto, la GE fue más baja en el ciclismo en decúbito supino, particularmente obvia en una condición principalmente aeróbica a 70 vatios [mediana 11.6 (IQR 10.9-13.3) vs condición reclinada: 15.9 (IQR 15.6-18.3) y en posición vertical: 17.4 (IQR 15.1-18.3)].

La potencia máxima, así como los valores de GE y de eficiencia en el trabajo están influenciados por la posición al hacer ejercicio de pedaleo, lo que refuerza la importancia de ajustar los resultados de las pruebas para las prescripciones de entrenamiento. Sorprendentemente, la eficiencia ventilatoria no se vio afectada en este estudio y, por lo tanto, no parece 'falsear' los resultados de las pruebas para el diagnóstico pulmonar.

CONCLUSIONES

El presente estudio demuestra por primera vez el efecto de la postura sobre la eficiencia del pedaleo no sólo en posición supina o erguida, sino también en una posición reclinada clínicamente relevante durante una prueba de esfuerzo graduada.

Los resultados muestran una mayor potencia y una mayor eficiencia del pedaleo en el ciclismo erguido en comparación con la postura reclinada y supina, aunque la eficiencia ventilatoria se vio menos afectada por la postura. Por lo tanto, esto indica que los tests de CPET se pueden realizar en posición supina o reclinada sin desencadenar resultados falsamente negativos con respecto a los valores ventilatorios pronosticados como la curva VE/VCO2. Sin embargo, al considerar los rendimientos submáximos y máximos como valores pronósticos, es fundamental considerar las diferencias debidas a la postura.

El resultado de este estudio también refuerza la importancia de ajustar los resultados de la prueba, dependiendo de las posiciones del test al prescribir programas de entrenamiento para aseguren un estímulo de entrenamiento adecuado. Por lo tanto, es esencial mencionar la posición de la prueba al informar los resultados de un test CPET.