“Uso del modelo convencional de rehabilitación cardiovascular, para reducir los factores de riesgo cardiovasculares, en pacientes post accidente isquémico cerebral transitorio y ACV menor”
Publicado 6 de marzo de 2014, 16:26
Investigadores de la Universidad de Southampton, en Inglaterra y de la Universidad de Auckland en Nueva Zelanda, han adelantado los resultados de un interesante estudio, que será publicado en la revista de divulgación científica Clinical Rehabilitation en Abril del 2014.
En el demuestran que la utilización de un Programa estándar de Rehabilitación Cardiovascular, de tan solo ocho semanas, es seguro, factible y efectivo para disminuir el riesgo cardiovascular, de pacientes que han sufrido previamente un evento cerebrovascular menor y un accidente isquémico cerebral transitorio.
Si bien se la muestra en estudio fue de solo 24 pacientes, los resultados obtenidos en el grupo rehabilitación fueron significativos, lo que coincide con otros estudios similares, y muestra que, las técnicas aplicadas en RHCV son útiles para mejorar el estado vascular de los pacientes en general y no solo de los que han sufrido un evento cardíaco.
Les presento el resumen del estudio que será formalmente publicado en abril del 2014.
“Uso del modelo convencional de rehabilitación cardiovascular, para reducir los factores de riesgo cardiovasculares, en pacientes post accidente isquémico cerebral transitorio y ACV menor”
Se trato de evaluar, la eficacia y viabilidad de un programa de RHCV estándar en la reducción de los factores de riesgo cardiovascular para pacientes que habían sufrido un evento cerebrovascular menor y un accidente isquémico transitorio.
El estudio, fue simple ciego y controlado aleatorizado.
Ingresaron el estudio veinticuatro pacientes, todos recibieron una atención estándar convencional para pacientes vasculocerebrales, pero el grupo intervención, recibió además, ocho semanas de un programa de RHCV convencional, consistente en educación sanitaria, control médico y ejercicios físicos.
Se midieron al ingreso y luego de la intervención de las ocho semanas de RHCV, una puntuación de riesgo de enfermedad cardiovascular, los perfiles de lípidos, la presión arterial en reposo, los niveles de proteína C-reactiva y el fibrinógeno, también la glucosa sanguínea, el peso corporal, los niveles de actividad física, el estado de salud subjetivo utilizando el formulario Short Form – 36 y finalmente una escala de ansiedad y depresión.
Resultados: el grupo intervención mostró una mejoría significativamente mayor en la puntuación de riesgo de enfermedad cardiovascular en comparación con la atención estándar (grupo intervención 25,7 ± 22,8 a 23,15 ± 18,3, grupo control 25,03 ± 15,4 a 27,12 ± 16,1, t = -1,81, P < 0,05).
También hubo mejoras significativas en el grupo de intervención en los niveles de actividad (grupo intervención 9.41 ± 07.07 a 08.08 ± 5.7 , grupo control de 14,50 ± 5,5 a 9,83 ± 6,6 , t = -2,00 , p < 0,05) y en el SF- 36 preguntas de funcionamiento físico (grupo intervención de 70 ± 24,6 a 75,4 ± 11,1 , grupo control 90,00 ± 12,4 a 83,16 ± 17,3 , t = -2,72 , P < 0,05 ) y en la escala de salud mental (grupo intervención 84 ± 40 a 92 ± 40 , grupo control 88,00 ± 60 a 84 ± 44 , t = -2,06, P< 0,05 ).
Conclusión: Estos resultados, nos sugieren que los programas estándar de RHCV, utilizados para pacientes cardíacos, son también un eficaz y viable recurso terapéutico para reducir el riesgo de futuros eventos cardiovasculares en pacientes que han sufrido previamente un ACV menor y ataques isquémicos transitorios.