Efectos Fisiológicos del Entrenamiento del HIIT en Futbolistas Jóvenes: Una Revisión Sistemática

Tabla 1. Tabla resumen de los estudios analizados

DISCUSIÓN

El objetivo de esta revisión sistemática ha sido analizar el efecto fisiológico de futbolistas jóvenes de entre 17 y 21 años con respecto al entrenamiento del HIIT, de igual modo y como objetivos secundarios se ha buscado i) examinar el VO2 y VO2Máx. de los jugadores de la muestra, ii) Identificar fortalezas y debilidades del entrenamiento del HIIT, iii) analizar la mejoría o no del músculo esquelético, iv) comparar los efectos del HIIT y SSG.

Se ha podido comprobar que tras el entrenamiento del HIIT en comparación con los grupos control (GC) existen algunas mejoras que reseñar a nivel generalizado. De esta forma, el VO2 pico mejoró en HIIT y entrenamiento continuo de intensidad moderada (MICT), pero el umbral anaeróbico y la recuperación de la frecuencia cardiaca mejoraron significativamente tan sólo en el grupo HIIT (Fang et al., 2021). En cambio, según Karaküçük et al. (2021) la presión arterial sistólica y diastólica y la saturación de oxígeno no cambiaron significativamente en aquellos sujetos sometidos a un entrenamiento interválico de alta intensidad en comparación al grupo control.

Por otro lado, si se compara la eficacia de un programa de entrenamiento descontextualizado mediante un método HIIT y el entrenamiento en base a los juegos reducidos contextualizados a la situación de juego (SSG) los grupos HIIT y SSG no mostraron diferencias significativas en las respuestas de frecuencia cardiaca (FC) y esfuerzo percibido (Selmi et al., 2020). Si bien se pudo observar una mejora significativa en los niveles de hematocrito en aquellos sujetos sometidos a un entrenamiento interválico (Karaküçük et al., 2021). En la misma línea el VO2 máximo aumentó de forma significativa tras llevar a cabo los programas de entrenamiento tanto en el grupo MIT (p = .012) y el grupo HIIT (p = .028) si bien el umbral anaeróbico aumentó únicamente después del entrenamiento del HIIT (p = .025) (Fang et al., 2021).

Otro aspecto importante a destacar fue la mejoría de los grupos musculares implicados en el entrenamiento del HIIT. En esta línea según Ziyaiyan et al. (2023) no hubo diferencias significativas en los valores del examen de sangre en reposo de Miogenina ni tampoco en la respuesta aguda de los valores séricos de Miogenina y Miostatina a la prueba aeróbica máxima, pero sí en los valores séricos en reposo de Miostatina entre los grupos de entrenamiento y control pasadas las ocho semanas de HICT (High Intensity Circuit Training). A su vez el análisis entre el grupo HIIT y el grupo SSG reveló un salto horizontal bilateral (SBJ) y una prueba de triple salto significativamente menor en el grupo SSG tras el periodo de reentrenamiento (Clemente et al., 2022). En esa línea y aún mejor detallado por las biopsias que se realizaron en su estudio antes y después de su intervención, Fransson et al. (2018) afirmaron que la capacidad máxima de la actividad enzimática aumentó en un 18% solo en el grupo de trabajo de 6-10 carreras de 30 segundos con 3 minutos de recuperación entre carrea y carrera (SET), demostrando una mejora mayor que SSG, mientras que la actividad 3-Hidroxiacil-CoA-Dehidrogenasa aumentó en un 24% en ambos grupos. La expresión de la proteína NA+-K+ ATPasa aumentó en SET y SSG (19 y 37%, respectivamente), mientras que la expresión de la proteína MCT4 aumentó en un 30% en el grupo SET y un 61% en el grupo SSG (Fransson et al., 2018). En la línea de estudios anteriores con mejorías del músculo esquelético Fang et al. (2021) demostraron que la fuerza isocinética mejoró de manera notable en el grupo HIIT a 60º/s y en el grupo MICT a 240º/s.

En sintonía con lo comentado anteriormente Clemente et al. (2022) obtuvieron los siguientes resultados: el grupo SSG presentó significativamente mayor altura, masa corporal y masa grasa tras el reentrenamiento en comparación con HIIT. Además, el grupo SSG presentó valores significativamente menores que HIIT en el zig-zag con balón, pero tiempos mayores en el zig-zag sin balón y en la prueba de carrera en 3 esquinas pudiendo ser el HIIT un método de entrenamiento efectivo para la mejoría de ciertos aspectos del juego de manera individual, todos con mejoría a nivel físico sin balón, apreciando carencias en este sistema de entrenamiento en pruebas que se realizaban con balón.

Continuando con los análisis de mejorías de Test en cuanto al enfoque muscular y a la ganancia de eficiencia en el salto, Barahona-Fuentes et al. (2019) observaron que la altura en el Test de Sargent presentó un aumento significativo después del entrenamiento del HIIT sólo para el grupo experimental (GE). En relación con los picos de potencia (Pp), sólo aquellos jugadores que realizaron un entrenamiento interválico de alta intensidad presentaron un aumento significativo post intervención. Sin embargo, ninguno de los sistemas analizados y estudiados mejoraron la composición corporal de manera evidente (Clemente et al., 2022; Fang et al., 2021). No así en la capacidad aeróbica y potencia anaeróbica, en este caso en todo momento se apreció una mejora con el sistema de entrenamiento que se use, siendo más notable en la potencia máxima anaeróbica Wingate (test anaeróbico que consiste en realizar un tiempo determinado un esfuerzo máximo por poco tiempo) que había aumentado significativamente en las series 1, 2 y 3 en el grupo HIIT, pero sólo mostró una mejora significativa en la serie 1 en el grupo MICT (Fang et al., 2021).

Referente a los métodos usados de HIIT, con y sin balón y con cambios de dirección o en línea recta, se encontró un efecto principal del grupo de entrenamiento para el test 505 con sprint con cambio de dirección (CODT) el cual indujo un mejor rendimiento que sprint lineal (LST) y grupo control. Además, se observó un efecto principal del grupo de entrenamiento para el test 15 m. con balón con CODT, que indujo un mejor rendimiento que LST y grupo control (Marzouki et al., 2022). Por todo lo anterior, se puede pensar que el HIIT en sprint lineal sólo sería efectivo si se busca la mejora de un aspecto de alta intensidad repetida (Fransson et al., 2018). Esto lo podemos correlacionar con que la puntuación PACES (Escala de Disfrute de la Actividad Física) fue mayor en SSG que en HIIT (Selmi et al., 2020). Siendo HIIT más efectivo que en la mejora del Sprint lineal pero no para una mejoría en los cambios de dirección (COD) o para ganar altura en el salto vertical. Por lo que se recomienda al lector que, puede alternar un sistema u otro en función del objetivo que persiga en su entrenamiento. 

FUTURAS LÍNEAS DE INVESTIGACIÓN

Teniendo en cuenta que el HIIT ha demostrado mejoras en la FC, la potencia anaeróbica, la altura de salto, pico de potencia y aumento de rendimiento en los sprints lineales y los SSG han demostrado una mayor eficacia que el HIIT en la mejora de los sprints con cambios de dirección y en las acciones con balón, la principal línea de investigación futura debería tratar de responder a cuál de los dos métodos es capaz de mejorar en mayor medida el rendimiento en competición. Para ello, teniendo en cuenta la dinámica holística y no lineal sobre la que el fútbol está sustentado, tratar de responder a cuestiones como ¿Supone una mejora analítica del rendimiento físico un mejor rendimiento en competición? ¿Puede ser más eficaz el entrenamiento mediante juegos en espacio reducido a la hora de incrementar la eficacia técnica y táctica, a pesar de que las mejoras condicionales sean menores? Para dar respuesta a estas preguntas, deberán plantearse estudios desde una perspectiva ecológica en los que el jugador sea analizado, no solo desde un enfoque analítico, sino atendiendo a la globalidad del deporte objeto de estudio.

Por último, teniendo en cuenta que el fútbol femenino cada vez tiene una presencia más notable y existe un crecimiento enorme en la participación en el fútbol de mujeres y niñas, sería conveniente el estudio de los efectos fisiológicos del entrenamiento del HIIT en el sexo femenino por su diferencia hormonal y fisiológica con respecto de los hombres.

CONCLUSIONES

Las conclusiones de este trabajo fueron las siguientes: i) El HIIT aumentó el umbral anaeróbico y la potencia, por lo que el HIIT a corto plazo podría ser una estrategia de entrenamiento eficiente en el tiempo, ii) Los niveles de Hematocrito aumentaron notablemente. La FC y la presión intraocular disminuyeron. Debido a esa mejora en niveles de Hematocritos el HIIT mejoró la capacidad oxidativa muscular y el rendimiento del ejercicio de forma más pronunciada que el entrenamiento de SSG, iii) El HIIT puede disminuir los valores séricos en reposo de Miostatina. Esto puede beneficiar a que los tejidos musculares se encuentren con una menor limitación para su crecimiento y a su vez favorezca su aumento en el desarrollo normal de los músculos, iv) El entrenamiento pliométrico basado en HIIT es una herramienta efectiva para incrementar la altura de salto y el pico de potencia, v) Visto que el disfrute es más satisfactorio en los SSG que en el entrenamiento del HIIT, se intuye que se puede alternar un sistema u otro en función del objetivo que se persiga en el entrenamiento. Los programas de entrenamiento con balón son más eficaces para mejorar los niveles de condición física de los jugadores jóvenes durante el periodo de temporada.