Un examen y crítica de los métodos actuales para determinar la intensidad del ejercicio

Prescribir la frecuencia, duración o volumen del entrenamiento es simple ya que estos factores pueden alterarse manipulando el número de sesiones de ejercicio por semana, la duración de cada sesión o el trabajo total realizado en un período de tiempo determinado (por ejemplo, por semana). . Sin embargo, prescribir la intensidad del ejercicio es complejo y existe controversia con respecto a la confiabilidad y validez de los métodos utilizados para determinar y prescribir la intensidad. Esta controversia surge de la ausencia de un marco acordado para evaluar la validez de constructo de los diferentes métodos utilizados para determinar la intensidad del ejercicio. En esta revisión, hemos evaluado la validez de constructo de diferentes métodos para prescribir la intensidad del ejercicio en función de su capacidad para provocar alteraciones homeostáticas (p. ej., cambios en la cinética del consumo de oxígeno y el lactato sanguíneo) consistentes con los dominios del ejercicio moderado, intenso y severo. Los métodos para prescribir la intensidad del ejercicio incluyen un porcentaje de mediciones de anclaje, como el consumo máximo de oxígeno ((Fórmula: ver texto)), el consumo máximo de oxígeno ((Fórmula: ver texto)), la frecuencia cardíaca máxima (FC_máximo), y la tasa de trabajo máxima (es decir, potencia o velocidad-(Fórmula: ver texto) o (Fórmula: ver texto), respectivamente), derivada de una prueba de ejercicio gradual (GXT). Sin embargo, a pesar de su uso común, es evidente que prescribir la intensidad del ejercicio basándose en un porcentaje fijo de estos anclajes máximos tiene poco mérito para provocar perturbaciones homeostáticas distintas o específicas de un dominio. Algunos han abogado por el uso de anclajes submáximos, incluido el umbral ventilatorio (VT), el umbral de intercambio gaseoso (GET), el punto de compensación respiratoria (RCP), el primer y segundo umbral de lactato (LT).₁ y LT₂), el estado estacionario de lactato máximo (MLSS), la potencia crítica (CP) y la velocidad crítica (CS). Existe cierta evidencia que respalda la validez de la LT.₁GET y VT para delimitar los dominios del ejercicio moderado y intenso. Sin embargo, hay poca evidencia que respalde la validez de los métodos más comúnmente utilizados, con excepción de CP y CS, para delimitar los dominios del ejercicio intenso y intenso. Como las respuestas agudas al ejercicio no siempre predicen adaptaciones crónicas, se requieren estudios de entrenamiento para verificar si los diferentes métodos para prescribir el ejercicio afectarán las adaptaciones al entrenamiento. Mejores formas de prescribir la intensidad del ejercicio deberían ayudar a los científicos, investigadores, médicos y entrenadores del deporte a diseñar programas de entrenamiento más efectivos para lograr mayores mejoras en la salud y el rendimiento deportivo.