En notas anteriores hemos hecho referencia al
enfoque de
entrenamiento
de grandes deportistas de la historia como
Emil
Zatopek, o de los entrenadores que han acompañado a estos grandes
deportistas, tales como
Jack
Daniels.
En esta oportunidad presentamos a un
deportista de
resistencia
de una trayectoria impresionante que a diferencia de muchos otros grandes de la
historia logró prolongar su carrera deportiva exitosa durante mucho tiempo.
Desarrollaremos así el enfoque de
entrenamiento
del gran triatleta Mark Allen, en base a la recopilación que nos permite
disfrutar el inoxidable
Tim Noakes en su libro
Lore of Running.
Logros
Deportivos
La carrera de Allen como profesional full-time
comenzó en 1983 cuando participó en su primer triatlón Ironman de Hawai,
habiendo ganado el
Half-Ironman
Horny Toad en San Diego en 1982. En el mismo año ganó los Campeonatos
Internacionales de Triatlón de Niza. Ganó 66 de 96 competencias que disputó,
finalizando en el top 3 en el 90% de sus competencias. Entre 1988 y Abril de
1991 nunca fue vencido en 20 competencias.
Sus 15 años de carrera como profesional
finalizaron con su victoria en el Ironman de Hawai en 1995 a la edad de 37
años.
Su
Historia
La carrera deportiva de Allen comenzó a la
edad de 10 años, cuando comenzó a nadar de forma competitiva. A la edad de 12
años seguía un régimen de entrenamiento basado en una filosofía simple: “trabaja
más y más rápido, si podía simplemente entrenar más metros, y más rápido,
entonces seguramente iba a poder competir más rápido. O eso pensaba” (Maffetone,
1996).
La transformación de Allen desde un nadador
quemado al mejor triatleta del mundo comenzó en 1981, cuando tomó contacto con
Julie Moss, la deportista que más tarde se convertiría en su esposa. En pocos
días, Allen se decidió a probar en el
triatlón.
Terminó cuarto en un demandante evento para el que no había entrenado, y
aprendió dos aspectos cruciales. Primero, que tenía una capacidad natural para
este deporte, y segundo, que en una competencia de
triatlón,
la carrera no se termina hasta la línea final.
Para ese entonces, su entrenamiento continuaba
estando basado en el viejo modelo “trabaja más y más rápido”. Sus resultados
eran nuevamente impredecibles, en parte debido a que a diferencia del deporte
que no implica el transporte de la masa corporal, la
natación,
el pedestrismo si lo implica, lo que introduce un componente adicional
potencialmente lesivo.
Otro punto de inflexión en su carrera se
produjo en 1984, cuando conoció a Phil Maffetone, un kinesiólogo aplicado que
le sugirió que estaba entrenando demasiado duro para poder ser continuamente
exitoso en el medio y largo plazo. Así, le propuse entrenar menos duro por un
período de tres meses cada año. Utilizando la Fórmula de Maffetone, Allen entrenaba
a un
ritmo
que no le implicara superar una
frecuencia
cardíaca de 150 latidos/minuto. El rendimiento de Allen se volvió más
consistente de modo que ganó los Campeonatos Mundiales de 140 km de Niza,
Francia, 10 veces. A pesar de no haber sido batido nunca en esa competencia,
todavía había una debilidad en su enfoque, era incapaz de convertir su
dominancia internacional en la distancia de triatlón estándar de 51,6 km o del
triatlón de Niza (140 km) en éxito en el Ironman de Hawai (226 km).
En seis participaciones en Hawai entre 1982 y
1988, había sido capaz de disputar la competencia, pero solo para ver su
ritmo
de competición reducido a una caminata en los últimos 90 min o 21 km de la
prueba.
Antes de 1989 decidió cambiar su enfoque
mental. Se dio cuenta que le tenía miedo a la carrera y que había desarrollado
un modo de pensar negativo hacia toda la experiencia, especialmente el ambiente
intransigente en el cual se llevaba a cabo la prueba. También había tratado de
ganar la carrera entrenando tan duro como pensaba que era necesario. Y se dio cuenta
que esta carrera requería más de lo que estaba preparado para dar, por lo que
se decidió a hacer “todo lo que fuera necesario (whatever it takes)” para
ganar.
El hecho de que pudo corregir sus fallas se
demuestra en que ganó 5 veces consecutivas entre 1989 y 1993, para luego
regresar victorioso una vez más en 1995 antes de retirarse.
Su
Enfoque de Entrenamiento
Su enfoque estaba basado en dividir el año en
tres partes.
Fase de Paciencia (Enero)
Estaba basado en entrenamiento “aeróbico” y de
sobrecarga.
Intensidad
límite: 150 lat./min (fórmula de Maffetone)
Duración: 12 semanas
Volumen:
27 h
Natación:
21 km
Ciclismo:
500 km
Pedestrismo: 90 km
Para monitorear su progreso, Allen completaba
una carrera de 8 km a la FC límite de 150 latidos/minuto. Durante la fase de
paciencia, su ritmo medio a esta FC subía progresivamente. Cuando comenzó a
utilizar la fórmula de Maffetone, su ritmo durante el test era de 4’05’’/km.
Durante la Fase de Paciencia, Allen esperaba que su ritmo mejorara en 3-4
segundos/km por cada semana de entrenamiento. En 1995 su ritmo a esta misma FC
era de 3’19’’/km.
Fase de Trabajo de «Velocidad»
Duración: 6-12 semanas
Reducción del volumen.
Dos sesiones de “velocidad”, una en ciclismo,
y un entrenamiento del tipo Fartlek en pedestrismo.
Volumen
Natación:
18,5 km
Ciclismo:
480 km
Pedestrismo: 8 h.
Fase de Empuje (8 semanas antes
de Hawai)
Duración: 4 semanas
Volumen
de la semana de mayor carga: 38 h
Natación: 28 km (8 h)
Ciclismo: 800 km (22 h)
Pedestrismo: 8 h.
Taper
Duración: 4 semanas
Disminución progresiva
del volumen hasta 160 km (ciclismo).
Semana previa al Ironman
Ciclismo: 60 km
Pedestrismo: 16 km.
Allen ha planteado que
la clave para la longevidad y consistencia que logró en su carrera deportiva
fueron los tres meses de entrenamiento aeróbico de baja intensidad en la Fase
de Paciencia que realizaba al inicio de cada año.