Este artículo está escrito por nuestra autora invitada Wivine Mbalazau.
Entrenar como joven deportista requiere dedicación, trabajo duro y tiene múltiples beneficios. Sin embargo, a veces esto conlleva dificultades o algunas consideraciones clave para garantizar la seguridad, el progreso y los mejores resultados posibles de tu entrenamiento.
1. Beneficios de entrenar como deportista joven
¡Para empezar, veamos los aspectos positivos! Entrenar como un joven atleta implicará múltiples beneficios, como mejores logros académicos, comportamiento social positivo, disminución de la obesidad y una mejor autodisciplina. Puede ayudarte con tu vida como adulto joven o niño e incluso mejorar tu vida fuera del deporte. Esto se debe a que puede mejorar la salud mental y física y garantizar un mejor estilo de vida en general para los jóvenes. A través del deporte, los niveles de confianza también pueden aumentar y comenzar a una edad temprana puede formar una base saludable para el desarrollo futuro.
2. Estrés
Los niveles moderados de estrés pueden ser buenos para la motivación y el rendimiento durante el entrenamiento deportivo. Sin embargo, nunca debes presionarte demasiado. El estrés excesivo nunca es beneficioso y puede tener consecuencias negativas como el insomnio. Esto también puede causar problemas de salud mental o disminuir el nivel de rendimiento deportivo, lo que hace que los atletas jóvenes sean más propensos a abandonar su deporte, por lo que la prevención del estrés es muy importante. Algunas formas de evitar estresarte como atleta es practicar un deporte de forma recreativa. Solo por diversión, tómate un tiempo para relajarte, esto podría ser con familiares y amigos y trata de que tu entrenamiento sea divertido siempre que sea posible. Esto evitará que te canses de tu entrenamiento y significa que podrás tener un buen equilibrio entre tu vida de entrenamiento y tu vida normal.
3. Posibles lesiones
Dado que nuestro cuerpo no es perfecto, especialmente el de un deportista, las lesiones son muy comunes. Factores como un entrenamiento deficiente, el uso de equipos inadecuados y entrenar demasiado a alta intensidad aumentan la probabilidad de que se produzcan lesiones. Las lesiones menores pueden ser fáciles de superar. Sin embargo, puede haber obstáculos mayores como consecuencia de lesiones, como la incapacidad de practicar cualquier deporte durante un período de tiempo o, en el peor de los casos, se podrían causar daños graves al cuerpo. Este es un recordatorio de que siempre debes entrenar adecuadamente y cuidar tu cuerpo para evitar lesiones que puedan retrasar tu entrenamiento o progreso como joven deportista. ¡Escucha a tu cuerpo!
4. Prevención de lesiones
Las lesiones a veces son inevitables, pero hay algunas formas en que puedes protegerte como atleta para evitarlas. Por ejemplo; Asegúrate siempre de realizar un buen calentamiento antes de los entrenamientos y competiciones, realizando estiramientos cuando sea necesario, teniendo periodos de descanso y equilibrando tu entrenamiento. Cosas como esta garantizarán una vida de entrenamiento saludable y te mantendrán a salvo.
5. Formación a largo plazo
El entrenamiento a largo plazo puede resultar muy beneficioso si se realiza correctamente. Esto puede incluir programas de formación estacionales o de larga duración. Siempre debes asegurarte de que tu programa de capacitación sea realista y adecuado para ti, de modo que si no tienes los conocimientos suficientes para crear uno, no te avergüences. Puedes investigar, pedirle a tu entrenador que cree uno o incluso encontrar uno en línea. Como atleta joven, puedes desarrollar progresiva y sistemáticamente tanto el cuerpo como la mente para lograr la excelencia a largo plazo en lugar de un éxito inmediato seguido del agotamiento.
Foto de encabezado por Alexander Nadrilyanski