La visión y el deporte
En el deporte de rendimiento es muy común ver entrenamientos de capacidades condicionales y en menor medida de las capacidades coordinativas. En general la investigación científica intenta demostrar cuales son las necesidades del deporte y que tipos de entrenamientos optimiza ese rendimiento. La visión es un tema poco abordado y muchos deportes y/o deportistas podrían mejorar más si incluyeran este tipo de trabajo dentro de sus programas de entrenamiento.
El ojo es un receptor sensitivo que funciona de forma muy similar a una cámara. Enfoca la luz sobre una superficie sensible (la retina) utilizando una lente (el cristalino) y una apertura u orificio (la pupila) cuyo tamaño es dinámico y puede modificarse según la cantidad de luz que desea que ingrese. La visión es el proceso por el cual la luz reflejada en los objetos de nuestro entorno es traducida a estímulos que puedan generar una imagen mental.
La visión, constituye un factor principal en algunos deportes, donde la precisión y los reflejos forman parte de la competencia (Deportes de combate, deportes de raqueta, Tiro, Baseball, etc.). Se debe saber que este órgano (ojo) es totalmente entrenable y se hace más eficiente cuando introducimos ejercicios de precisión ocular tanto fijos como dinámicos. Esto pasa por que el ojo está comandado por músculos denominados ciliares.
El primer paso para la visión, es cuando la luz ingresa al ojo, esta es deformada de 2 formas. Primero, la cantidad de luz que alcanza los fotorreceptores es modulada por cambios en el tamaño de la pupila. Segundo, la luz es enfocada por cambios de forma del cristalino. De esta manera estas 2 variaciones y gracias al rango lumínico que contienen los fotorreceptores, la intensidad de la luz puede variar unas 100.000 veces.
Además de la intensidad lumínica, que puede ser un factor clave para la competencia, también existe otro gran factor que influye sobre el desempeño del deportista. La distancia a la que se desarrolla la competencia. Se sabe que a una distancia más cercana de 6 metros, se crearán rayos de luz que no son paralelos y llegan al cristalino con cierto ángulo. Estos rayos de luz ya no convergen en el punto de mayor agudeza visual sobre la retina y el objeto aparece borroso y fuera de foco. Para mantener un objeto cercano en foto, el cristalino debe estar redondeado para aumentar el ángulo de refracción. Así, el cristalino se vuelve más convexo, los rayos de luz convergen sobre la retina en lugar de hacerlo detrás de ella.
Para comprender un poco mas respecto a la visión, primero describiremos un poco el fenómeno de la fototransducción.
La transducción de la energía luminosa en potenciales de acción tiene lugar cuando la luz llega a la retina, el órgano sensorial del ojo. En realidad, solo una pequeña parte de luz que entra en nuestros ojos es percibida por nuestro cerebro (La luz ultravioleta e infrarroja son los límites del espectro de luz visible).
En el ojo humano, los fotorreceptores de la retina traducen la energía luminosa en señales eléctricas. Las neuronas de la retina están organizadas en capas. Detrás de la porción fotosensible, hay una capa de epitelio pigmentario oscuro. Su función es absorber cualquier rayo de luz que escapa de los fotorreceptores, lo que impide que la luz se refleje hacia el interior del ojo y distorsione la imagen visual real.
Las capas de las neuronas están en orden inverso, los fotorreceptores se encuentran en la parte posterior, con sus extremos fotosensibles dirigidos contra el epitelio pigmentario. La luz que entra en el ojo, debe atravesar varias capas relativamente transparentes de neuronas antes de incidir sobre los fotorreceptores.
Una excepción, a este patrón ocurre en una pequeña región conocida como fóvea. En esta área, los fotorreceptores reciben la luz directamente por que las neuronas son empujadas hacia los costados y además se encuentra libre de vasos sanguíneos que ni dificultan el proceso. La fóvea junto con la mácula son las regiones de visión más aguda formando el centro del campo visual. En ellas se enfoca la luz cuando usted observa un objeto.
Existen 2 tipos de fotorreceptores, los bastones y los conos. Los bastones son los más abundantes en relación de 20 a 1 con los conos y son los encargados de la visión nocturna. Estos funcionan bien con poca luz cuando los objetos se ven en blanco y negro y no distinguen colores. Los conos son responsables de la visión a color (reconoce solo los colores primarios de la luz, rojo, amarillo y verde) y de alta agudeza. En la fóvea es el único lugar donde los bastones no son abundantes, y solo se encuentran conos para optimizar el proceso de captación de la imagen.
Ahora que sabemos cómo funciona de manera global el ojo, podemos entender de qué manera lo podemos entrenarpara aumentar la eficiencia de nuestros deportistas.
Pero, ¿Cómo podemos aumentar el beneficio deportivo a través del entrenamiento de la visión? Muy simple, hay ejercicios que se pueden realizar con movimiento o sin movimientos.
Casi todos los seres humanos son evaluados de la vista en diferentes momentos de su vida. Por ejemplo para adquirir y/o renovar la licencia de conducir se debe pasar por un test de agudeza visual. La agudeza visual es un concepto y se determina de acuerdo a unos estándares preestablecidos. Una visión 20/20 significa que ud. ve a 20 pies lo que las personas normales ven a 20 pies. Un visión de 20/100 significa que ud. ve a 20 pies lo que las personas normales ven a 100 pies. Por lo general el test más común de agudeza visual es la carta de Snellen. Esta se puede adquirir en establecimientos especializados o se puede imprimir de la web y realizar el test en cualquier ámbito.
El campo visual es la porción del espacio que el ojo es capaz de ver o captar. El examen muy simple permite determinar los límites para cada ojo. Existe un campo visual lateral y otro vertical. Muchos deportistas se pueden beneficiar ampliando este campo de vista periférica.
También existe un ojo dominante que puede ser fácilmente detectable mediante un test que puede realizar ahora mismo. Extienda sus brazos y cruce las manos una sobre la otra superponiéndolas dejando solo un pequeño agujerito. Localice un punto cualquiera que vea a través de este agujero con ambos ojos. Luego cierre un ojo y trate de localizarlo, cierre el otro ojo y realice el mismo procedimiento. Se dará cuenta rápidamente que un ojo capta la imagen y el otro no. El ojo que la capta es su ojo dominante.
Existen distintos ejercicios muy simples que se pueden realizar con muy poco material, por lo que el dinero no es una limitante para este tipo de entrenamiento. En las próximas semanas, iremos subiendo algunos entrenamientos muy básicos, para la demostración, ya que por escrito se pueden entender fácilmente.