Las cargas de entrenamiento de campo y de resistencia de los jugadores de la liga de rugby de la academia durante una pretemporada: comparaciones entre posiciones de juego

Resumen

Los jugadores masculinos de la liga de rugby de la academia deben realizar entrenamiento de campo y de resistencia para desarrollar las cualidades técnicas, tácticas y físicas importantes para el éxito en el deporte. Sin embargo, hay investigaciones limitadas disponibles que exploran la carga de entrenamiento de los jugadores de la liga de rugby de la academia. Por lo tanto, el propósito de este estudio fue cuantificar las cargas de entrenamiento de campo y de resistencia de los jugadores de la liga de rugby de la academia durante un período de pretemporada y comparar las cargas de entrenamiento entre posiciones de juego (es decir, forwards vs. backs). Se analizaron retrospectivamente los datos de carga de entrenamiento de campo y de resistencia de 28 jugadores adolescentes varones (de 17 ± 1 años) de la liga de rugby después de un período de entrenamiento de pretemporada de 13 semanas (85 observaciones de entrenamiento en total; 45 sesiones de campo y 40 sesiones de entrenamiento de resistencia). Se utilizó la microtecnología del sistema de posicionamiento global y el volumen de repeticiones estimado para cuantificar la carga de entrenamiento externa, y la calificación de la sesión de esfuerzo percibido (sRPE) se utilizó para cuantificar la carga de entrenamiento interna. Las diferencias posicionales (delanteros n = 13 y atrás n = 15) en la carga de entrenamiento se establecieron utilizando un modelo lineal de efectos mixtos. La frecuencia media de entrenamiento semanal fue de 7 ± 2 con una duración total de 324 ± 137 minutos y un sRPE medio de 1562 ± 678 unidades arbitrarias (AU). Los backs cubrieron más distancias a alta velocidad que los forwards en las semanas dos (p = 0,024) y 11 (p = 0,028). En comparación con los delanteros, los traseros completaron un mayor volumen de entrenamiento de resistencia de la parte inferior del cuerpo en la semana uno (p = 0,02), más volumen de la parte superior del cuerpo en la semana tres (p < 0,001) y la semana 12 (p = 0,005). Los hallazgos proporcionan datos novedosos sobre el campo y la carga de entrenamiento basado en la resistencia realizados por los jugadores de la liga de rugby de la academia durante un período de pretemporada, destacando la relativa uniformidad entre las posiciones de juego. Cuantificar la carga de capacitación puede respaldar la toma de decisiones objetivas para la prescripción y manipulación de la capacitación futura, con el objetivo en última instancia de maximizar la capacitación dentro de las vías de desarrollo.

Introducción

Los atletas de la academia dentro del deporte participan en programas de entrenamiento estructurados para maximizar su desarrollo y progreso hacia niveles profesionales senior (1). La dosis de entrenamiento, definida por la frecuencia, volumen e intensidad del ejercicio, determina el tipo y magnitud de la respuesta al entrenamiento (2, 3). La prescripción del entrenamiento por parte de los entrenadores sigue siendo en gran medida instintiva, en consecuencia, se necesita investigación para comprender mejor el diseño del programa de entrenamiento.2, 4, 5). El seguimiento del entrenamiento se ha convertido en una práctica común en el deporte de élite, siendo el objetivo principal orientar e informar la prescripción del entrenamiento.6), que normalmente se cuantifica con referencia a la frecuencia, intensidad, tiempo y tipo de cada sesión (7). Los profesionales han adoptado el término «carga de entrenamiento», clasificando además la carga de entrenamiento externa (p. ej., la distancia recorrida medida por sistemas de posicionamiento global; GPS) y la carga de entrenamiento interna (p. ej., la percepción del atleta de la intensidad del entrenamiento medida por la calificación de la sesión del esfuerzo percibido; sRPE) para cuantificar el ejercicio (8).

La microtecnología (es decir, GPS y sistemas microelectromecánicos) ha permitido la detección de información cada vez más detallada sobre la carga de entrenamiento externa (por ejemplo, tacleadas), lo que ha llevado a una adopción generalizada de la microtecnología para cuantificar el entrenamiento en deportes basados ​​en colisiones, incluida la liga de rugby. (911). Los componentes de movimiento intermitente, colisión y habilidad del juego de la liga de rugby requieren que los jugadores tengan una amplia gama de capacidades técnicas (p. ej., pases, patadas, entradas) y físicas (p. ej., fuerza, velocidad, capacidad de esfuerzo repetido) (12). Los programas de entrenamiento deben exponer a los jugadores a la intensidad y el volumen específicos del partido durante toda la semana de entrenamiento (13). Por lo tanto, los jugadores participan en una amplia gama de modalidades de entrenamiento (por ejemplo, técnico-táctico, entrenamiento de resistencia, velocidad y acondicionamiento) para provocar adaptaciones específicas (12). sRPE ofrece una medida válida y fácil de implementar de la carga de entrenamiento interna que se puede utilizar en las distintas modalidades de entrenamiento (1416). En última instancia, un enfoque coordinado y sistemático que cuantifique la carga de entrenamiento tanto externa como interna proporcionaría conocimientos más completos sobre las demandas generales del entrenamiento y apoyaría el desarrollo de entrenamiento específico que tenga como objetivo desarrollar cualidades físicas y técnicas.16, 17). Sin embargo, hasta la fecha, los datos de entrenamiento disponibles dentro de la liga de rugby, en cualquier nivel, siguen siendo limitados, para utilizarlos como referencia sobre lo que puede considerarse una carga adecuada (18).

La investigación en la liga de rugby ha presentado las características del juego por partidos (1921) las cualidades físicas de los atletas en todos los estándares de juego (22, 23) e intervenciones de capacitación evaluadas (11), pero pocos estudios han cuantificado la carga de entrenamiento. gabbett (24) fue el primero en describir las actividades de entrenamiento típicas utilizadas para preparar a los jugadores profesionales para la competición y demostró que las demandas del juego competitivo no coincidían bien con las observadas en el entrenamiento. Negro y col. (18) luego cuantificaron la carga de entrenamiento externo en el campo de los jugadores profesionales de la liga de rugby utilizando GPS durante la temporada de juego, pero no tuvieron en cuenta el entrenamiento de resistencia ni la carga interna. Daniels y cols. (11) informaron sobre las características de fuerza, potencia y resistencia y su asociación con la carga de entrenamiento durante una pretemporada de 7 semanas. Al hacerlo, Daniels et al. (11) informaron la distribución del entrenamiento de la liga de rugby multimodal, donde las sesiones en el campo totalizaron el 48,5%, en el gimnasio el 37,9% y las sesiones de lucha el 13,6% durante el período de pretemporada. Si bien estos estudios amplían nuestro conocimiento sobre el entrenamiento, la investigación es exclusiva del estándar profesional adulto con información limitada disponible en jugadores de la academia. Dobbin y cols. (25) examinaron la influencia de la carga de entrenamiento en la composición corporal durante una pretemporada de 14 semanas en una liga de rugby académica, utilizando el sRPE como medida universal de la carga de entrenamiento. Más recientemente, McCormack et al. (26) informaron volúmenes de entrenamiento semanales que oscilaban entre 359 y 1.033 minutos, dependiendo de la fase de la temporada. Sin embargo, la cuantificación del volumen fue una estimación realizada por los entrenadores de una «semana típica» y no proporcionó datos objetivos sobre la carga de entrenamiento semanal acumulada en la liga de rugby académica. Por lo tanto, se justifican análisis más detallados que combinen microtecnología y sRPE para cuantificar la carga de entrenamiento en todas las modalidades (es decir, entrenamiento de campo y de resistencia).

Dado que tanto la carga de entrenamiento excesiva como la insuficiente pueden impedir el desarrollo atlético, comprender las cargas de entrenamiento específicas realizadas por los jugadores de la liga de rugby de la academia es importante para la planificación del entrenamiento futuro para maximizar el rendimiento atlético, la prevención de lesiones, la progresión del juego y el bienestar general.3). Las diferencias en la carga de entrenamiento, junto con las diferencias en ciertas capacidades físicas asociadas con posiciones y estándares de juego específicos, pueden influir en la comprensión de la prescripción adecuada del entrenamiento.1, 27). Ningún estudio ha cuantificado un período de pretemporada de la liga de rugby académica, considerando las demandas posicionales para cargas de entrenamiento tanto en el campo como en la resistencia. Una mayor comprensión del entrenamiento de la liga de rugby académica ayudará a los practicantes a planificar, impartir y evaluar el entrenamiento. Por lo tanto, el objetivo del presente estudio fue cuantificar las cargas de entrenamiento de campo y de resistencia de un período de pretemporada de la liga de rugby de una academia (U19) y comparar estas cargas de entrenamiento por grupos posicionales a lo largo de las semanas de entrenamiento.

Métodos

Diseño del estudio

Se utilizó un diseño de estudio observacional retrospectivo para cuantificar la carga de entrenamiento de campo y de resistencia de jugadores de la liga de rugby de nivel académico de un club profesional durante un período de pretemporada. El estudio incluyó entrenamiento de campo y de resistencia durante la pretemporada 2019/2020, lo que representa un período de 13 semanas de noviembre a febrero. La pretemporada estuvo compuesta por cuatro bloques de entrenamiento periodizados separados (bloque uno: dos semanas (nueve días de entrenamiento), bloque dos: tres semanas (quince días de entrenamiento), bloque tres: tres semanas (seis días de entrenamiento) y bloque cuatro: cinco semanas y (dieciséis días de entrenamiento), después de las vacaciones de invierno) centrándose en habilidades específicas del rugby, acondicionamiento aeróbico y anaeróbico, carreras de velocidad y fuerza muscular. El bloque tres incluía un período de descanso de 11 días (para las vacaciones de invierno). El conjunto de datos incluyó cargas de entrenamiento registradas mediante unidades de microtecnología, el método de repetición basado en la resistencia (series y repeticiones) y sRPE. Todo el entrenamiento se desarrolló en el campo de entrenamiento del club profesional bajo la supervisión de un cuerpo técnico cualificado.

Participantes

En el estudio participaron veintiocho jugadores masculinos de la liga de rugby de un solo club profesional que jugaban en la competición de la Superliga Sub-19 (edad 17 ± 1 años, masa corporal 90,1 ± 13,2 kg, altura 178,6 ± 6,4 cm). Debido a la naturaleza aplicada de esta investigación, el número de participantes incluidos estuvo dictado por las limitaciones de recursos de la organización deportiva profesional (28). Se capturaron un total de 46 días de entrenamiento durante el período de pretemporada de 13 semanas, con una media ± desviación estándar (DE) de 37 ± 7 observaciones de entrenamiento en el campo y 33 ± 7 en el gimnasio por jugador. Los jugadores se dividieron en dos grupos posicionales para proporcionar resultados específicos de cada posición: delanteros (n = 13) y laterales (n = 15). Todos los datos de capacitación recopilados fueron parte de la práctica habitual y el contenido de la capacitación no estuvo influenciado de ninguna manera por la investigación. El estudio recibió la aprobación del Comité Asesor de Ética de la Universidad Leeds Beckett, y todos los participantes y padres/tutores (cuando fuera necesario) dieron su consentimiento por escrito.

Trámites

Los jugadores se sometieron a 13 semanas de entrenamiento, que consistió en entrenamiento de fuerza y ​​acondicionamiento y habilidades específicas de la liga de rugby. Para capturar el entrenamiento concurrente empleado durante el período de pretemporada, el entrenamiento se clasificó en sesiones de campo y de gimnasio. La carga de entrenamiento semanal total se sumó y presentó para hacer comparaciones entre semanas, junto con la carga de entrenamiento media por sesión que representa el promedio semanal. Las sesiones de campo representaron sesiones de entrenamiento que incluyeron habilidades técnicas/tácticas, sesiones de acondicionamiento aeróbico y anaeróbico basadas en partidos, sesiones de velocidad y sesiones de combate similares a informes anteriores (11, 29). Las sesiones de gimnasio incluyeron todo el entrenamiento de resistencia realizado durante el período.

Cuantificación de la carga de entrenamiento.

Carga interna. Dada la naturaleza concurrente del entrenamiento realizado (es decir, en el campo y en el gimnasio), sRPE (14, 15) se utilizó como una medida consistente de la carga de entrenamiento en todas las modalidades de entrenamiento (6). El sRPE se calculó como la duración de la sesión multiplicada por el RPE del individuo. Los participantes calificaron sesiones individuales utilizando una escala de RPE de Borg Category Ratio-10 modificada (14, 15). Todos los jugadores estaban familiarizados con la escala antes del comienzo del estudio. Para minimizar el sesgo de la fase más reciente del ejercicio, los participantes registraron su RPE aproximadamente 30 minutos después del entrenamiento. Las grabaciones se tomaron de forma no verbal con cada participante por su cuenta y sin tener en cuenta otras puntuaciones para controlar las influencias externas. Se calculó el sRPE-TL medio por sesión, semanal y total para el período de 13 semanas tanto para el gimnasio como para el campo.

Carga externa. Se utilizaron unidades de microtecnología (Optimeye S5, Catapult Innovations Melbourne, Victoria) para cuantificar las cargas de las locomotoras en el campo. La validez y confiabilidad de los dispositivos de microtecnología que miden la velocidad instantánea, el recuento de colisiones y el PlayerLoad derivado del acelerómetro.MT ha sido establecido (30, 31). Los jugadores llevaban una prenda interior que albergaba la unidad de microtecnología colocada entre las escápulas según las instrucciones del fabricante. Se usaron las mismas unidades para observaciones repetidas y los dispositivos se encendieron 30 minutos antes del comienzo del entrenamiento (32). Los datos se descargaron de los dispositivos de microtecnología utilizando el software propietario (Catapult Openfield, v.1.21.1). La velocidad se calculó mediante el método de desplazamiento Dopler y la duración mínima del esfuerzo se estableció en 1 segundo (31). Lo instantáneo…

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