Motivación en el Fútbol Profesional

Claudio M Vasalo

Resumen

Se presenta una investigación realizada durante 1996-1997 en planteles de fútbol profesional donde se efectuó un análisis de los niveles motivacionales y los distintos tipos de reforzadores internos y externos que la configuran. En función de ello se determinó un perfil motivacional para el caso concreto.

INTRODUCCIÓN

«La Psicología del Deporte es una disciplina científica, cuya materia de investigación se basa en las manifestaciones psíquicas de los deportistas que realizan ejercicios físicos de forma sistemática. La Psicología del Deporte forma parte de la Psicología que se desarrolló en los últimos años a causa de los progresos conseguidos en el deporte de competición. Investiga las características de personalidad del deportista, los fundamentos psicológicos de las capacidades motrices, la preparación general para el deporte de competición, la ayuda psicológica, la distribución y elección del deportista, al igual que la psicología del entrenamiento y la competición»¹.

Desde este encuadre y con el objetivo de generar conocimiento con base empírica contextual es que se encaro la presente investigación. Como cuerpo teórico se tuvo presente al «Modelo de Motivaciones Deportivas» desarrollado por Dorcas Butt, en Canadá (1976).

Desde este modelo la Motivación Deportiva es descripta como relacionada o desarrollada en cuatro niveles: el biológico, el psicológico, el social y el nivel secundario de refuerzos.

El primer y el cuarto nivel son los de mayor influencia; una energía o fuerza biológica tiene que ver con todas las cosas de la vida y en el establecimiento de refuerzos aprendidos. Los refuerzos pueden ser extrínsecos: cuando son recompensas abiertas o públicas, o intrínsecos; cuando son por sentimiento y crecimiento personal.

El presente trabajo tuvo por objetivo establecer la relación de los reforzadores motivacionales internos y externos con la motivación psicológica y la motivación social en jugadores de fútbol profesional. La selección de los sujetos se realizó a través de un muestreo accidental. Se tomaron todos los jugadores profesionales, titulares y suplentes, de la primera categoría y reserva del Club Atlético Talleres de Córdoba y de San Martín de San Juan. El tamaño de la muestra fue de N= 40.

Los sujetos de la muestra fueron evaluados a través de la «Escala Corta para Medir Motivaciones Deportivas» de Dorcas Butt (1976); el «Cuestionario para medir Reforzadores Externos» de Silvina Brussino-Claudio Vasalo (1996); y el «Inventario de Autoestima» de Matthew Mckay-Patrick Fanning (1985).

El estudio de los datos se realizó a partir de un análisis bivariado. Los resultados de la investigación se presentan a continuación.

RESULTADOS Y CONCLUSIONES

Entendemos entonces a la Motivación como «Energía Disponible Para», definición que encierra en cierta medida anteriores revisiones formuladas acerca de la motivación por medio de autores como Sagredo, De Diego, Williams, etc.

Pensamos a la motivación como «Energía» dado que hace referencia directa con el impulso en que se presenta la motivación, coincidiendo de esta manera con los aportes de Sagredo y De Diego (1992), quienes plantean abiertamente que una de las aristas por donde debe entenderse a la motivación es por ese caudal energético que es la corriente impulsora de dicha variable.

Por su parte, el término «Disponible» marca que el caudal de impulsos se encuentra al servicio del deportista, cosa que muchas veces no sucede, dado que esta energía se encuentra latente por lo que preocupa a los entrenadores y a los deportistas. Esto se puede ver en las evidencias que presenta Wightman (1994) donde los verdaderos actores de la actividad deportiva manifiestan esta preocupación por la supuesta latencia del impulso motivacional.

Para cerrar la conceptualización, decimos que «Para» busca establecer una relación directa de la orientación del impulso con el objetivo de la satisfacción de determinadas necesidades, lo que viene a evidenciar que la supuesta latencia del impulso deportivo no es tal, sino que se encuentra dirigido a la satisfacción de otras necesidades que exceden al ámbito deportivo. En este sentido expresan conceptos similares Sagredo y De Diego (1992) cuando muestran que la motivación es como una energía eléctrica que únicamente ofrece un potencial si es guiada hacia una dirección correcta. Estos autores coinciden, por lo tanto en resaltar la importancia de orientar esta corriente energética al servicio del deportista.

De tal manera concluimos que la Motivación es el caudal de impulsos al servicio del deportista para la satisfacción de las necesidades que se presentan en esta área de desarrollo.

Teniendo en cuenta que los objetivos propuestos en la investigación pretendían establecer la relación de los Reforzadores Motivacionales Internos y Externos con la Motivación Psicológica y la Motivación Social en jugadores de fútbol profesional; empezaremos marcando la correlación de la Motivación Deportiva con los Reforzadores Externos.

Se observó que se produce una relación inversa entre el Nivel Educativo Alcanzado y el nivel de Motivaciones Deportivas. Es decir que «a mayor Nivel Educativo Alcanzado menor Nivel Motivacional«.

Alcanzar un mayor Nivel Educativo le posibilitaría al individuo el establecimiento de objetivos con compromiso intelectual evidente, lo que podría llevar a una desviación del impulso motivacional de lo físico hacia lo intelectual. Lo cuál encuentra una explicación en lo que se conoce como la «orientación» del impulso motivacional; es decir, se puede fundamentar utilizando los conceptos vertidos por De Diego y Sagredo(1992) quienes enfatizan que hay que tener en cuenta la dirección a la que apunta la motivación. De esta manera las autoras se basan en la Teoría de las Necesidades de Maslow para explicar distintas «orientaciones» del impulso motivacional; lo que nos permite suponer que los deportistas con un mayor Nivel Educativo poseen mayores posibilidades para satisfacer sus necesidades de Autorrealización, lo que viene a contestar el por qué no presentan el mismo nivel motivacional aquellos jugadores de inferior Nivel Educativo.

Lo mismo ocurre entre el Nivel Educativo Alcanzado y la Agresión Psicológica Es decir, que aquellos deportistas que quizás encuentren en el deporte una de las únicas posibilidades de satisfacción de sus necesidades de Autorrealización, se aferren a la misma de manera que terminen moldeando ciertas conductas de dominio de la situación en pos del logro del objetivo personal antes que la satisfacción de la necesidad grupal.

Con respecto a la variable «Pertenencia del Pase» se observa que aquellos jugadores cuyo pase pertenece al club en el que juegan presentan un alto nivel motivacional. Esto se fundamentaría teniendo en cuenta que la necesidad de seguridad , pertenecia y afiliación se satisfacen, por lo que los jugadores no deberían preocuparse por encontrar fuentes de satisfacción de estas necesidades, lo que le permite al deportista estar centrado aún más en la tarea en pos del logro del objetivo.

Las Motivaciones Sociales Deportivas se encuentran conformadas por dos dimensiones a saber: La Competición Social Motivacional y la Cooperación Social Motivacional, las cuales se relacionan con la «Condición Deportiva del jugador». En este sentido se observó que los jugadores Suplentes presentan un mayor Nivel de Competición Social Motivacional; y un mayor nivel de Cooperación Social Motivacional. Esto se desprende de que los jugadores Suplentes por un lado quieren lograr su objetivo de formar parte del equipo Titular, de tal manera que desarrollan un elevado grado de Competición Social, es decir que encauzarían su impulso motivacional con el único objetivo de ganarse el puesto y sentirse de esa manera más seguros. Perseguirían entonces un objetivo individualista y pretenden conseguirlo de cualquier forma, cabe aclarar que actualmente el jugador que no rinde de inmediato en un club es transferido o dejado en libertad de acción.

Por su parte, el elevado nivel de Cooperación Social de los jugadores suplentes también estaría dado por la necesidad de afiliación y de pertenencia que pretenderían saciar a traves de actividades grupales, lo que marca en cierta medida que estos jugadores pueden sentirse útiles al grupo y desarrollar tareas que le permitirían satisfacer necesidades sin la condición única de ser titulares. Es decir que, al igual que en relación a la variable «Pertenencia del Pase», el nivel de satisfacción de necesidades determinaría la orientación del impulso motivacional. Muestra esto la importancia que representaría la satisfacción de necesidades sociales en un primer momento, para luego sí, encauzar el impulso motivacional en relación al cumplimiento del objetivo.

Sin duda, esto evidencia un muy buen trabajo del cuerpo técnico que hace sentir parte del equipo a aquellos jugadores que no son titulares, cosa que no es sencilla, y menos en estos momentos donde la competencia es muy exigente.

En relación a la variable «Puesto en el Campeonato» se observó que existe una relación inversa entre esta variable y Motivaciones Deportivas . Al analizar estos resultados hay que tener en cuenta un par de situaciones externas que pueden llegar a configurar dichas marcas. En primer lugar la diferencia de posiciones es pequeña, lo que ya de por sí determina la existencia de otros factores, de manera que se puede entender mejor esto teniendo en cuenta que es una etapa clasificatoria y no una etapa eliminatoria, lo que lleva a que los planteles aún están en formación y la presión social se haga sentir en menor medida. Aquí resulta significativo poner en juego una variable más y es la trayectoria del club en la disciplina, lo que viene a explicar que el club que se encuentra tercero, Club Atlético Talleres de Córdoba, presenta una mayor trayectoria que el otro plantel y en relación a esta variable debería estar jugando en la Primera División del fútbol argentino y no disputar el torneo de Ascenso, hecho que conllevaría a que su nivel motivacional por lograr el ascenso sea mayor que el equipo Sanjuanino.

Como consecuencia de esto es que existe una relación inversa entre Puesto en el Campeonato y Conflicto Psicológico, es decir que existe una urgencia por conseguir el objetivo y dado que esto no es posible en ese momento podría estar generando un elevado nivel Conflictivo entre los jugadores. A su vez, este hecho muestra que los equipos que se encuentran en ubicaciones inferiores tienen un mayor nivel de Cooperación Social. Esto se debería a que al no estar consiguiendo el objetivo trazado, los planteles tratan de configurar nuevas estrategias de ejecución y también, permite que los jugadores nuevos se sientan parte del plantel configurando el perfil Cooperativo que los resultados indican.

En relación a la variable «Tiempo que Integra el Plantel» se concluye que existe una relación inversa entre la variable mencionada y el nivel de Motivaciones Deportivas, es decir «a menor tiempo que integra el plantel mayor nivel motivacional» , esto se explicaría desde dos perspectivas:

  • La necesidad de satisfacción de necesidades de afiliación y pertenencia a un grupo. Vuelve a evidenciarse la misma relación que apareció en las variables Pertenencia del Pase y Condición Deportiva, donde claramente se muestra la importancia que reviste para los integrantes de un plantel la satisfacción de las necesidades sociales. Claro está que en esta primera parte del campeonato, etapa clasificatoria, hay muchos jugadores provenientes de otros clubes que necesitan formar parte de un grupo que los contenga y los ayude a conseguir el objetivo del plantel.

  • Por otro lado la No Habituación a las Recompensas. Suele suceder que jugadores de larga trayectoria en un club se habitúan al reconocimiento social (ovación) que reciben de su parcialidad de seguidores y no se encuentran motivados como en un principio. Generalmente las gratificaciones o el reconocimiento aparecen por buenas ejecuciones, las cuales son realizadas por jugadores idóneos que generalmente son los que llegan a los clubes al comienzo de la competencia para reforzar al equipo para conseguir el objetivo. Al ser jugadores nuevos en el club encuentran en el reconocimiento social una fuente impulsora muy elevada para su nivel motivacional, que frecuentemente actúa como feedback, ya que estimula al deportista el cuál desarrolla buenas actuaciones y por consiguiente es recompensado.

Luego de haber mostrado la relación de los Reforzadores Externos con las Motivaciones Deportivas, trataremos de relacionar la misma variable con los Reforzadores Internos, donde se observó la existencia de una relación inversa entre la subescala de Autoestima «Funcionamiento Mental» y la subescala de Motivaciones Deportivas «Conflicto Psicológico Motivacional», es decir: «a mayor Funcionamiento Mental menor Conflicto Psicológico Motivacional». Los conflictos psicológicos generalmente son generados por la Crítica Patológica, la cuál tiene como herramienta principal a las Distorsiones Cognitivas. Las mismas se encargan de que el individuo interprete la realidad de manera tal que se vea perjudicado e inferior en relación al mundo que lo rodea. Esto explicaría el incremento del Conflicto Psicológico Motivacional.

Podría decirse entonces que los jugadores que presentan un elevado nivel de Funcionamiento Mental pueden controlar estas formas erradas y perjudiciales de interpretar la realidad, lo que traería aparejado un nivel de Conflicto Psicológico bajo.

Se observó también una relación inversa entre la subescala de Autoestima «Como me Ven los Demás» y la subescala de Motivaciones Deportivas «Conflicto Psicológico Motivacional», es decir «cuanto mejor los ven los demás menor es el Conflicto Psicológico Motivacional». Hay que tener en cuenta que es muy importante como perciben los deportistas su relación con el entorno que los rodea. Las Distorsiones Cognitivas pueden llevar a que los integrantes del plantel perciban e interpretan erróneamente su relación con el medio, lo que podría ser generador de Conflicto Psicológico.

El segundo objetivo que perseguía este estudio era establecer las variaciones entre los jugadores profesionales de fútbol y la relación con su Motivación Psicológica y su Motivación Social.

Para corroborar esta relación se llevaron a cabo pruebas de diferencias de medias aritméticas entre ambos clubes; donde se encontró una diferencia significativa en el nivel de Motivaciones Deportivas y algunas de sus subescalas, siendo mayor en el Club Atlético Talleres de Córdoba que en el Club Atlético San Martín de San Juan, que podríamos explicarlo en función de las correlaciones anteriormente mencionadas:

  • El plantel Sanjuanino presenta un Nivel Educativo mayor al presentado por el conjunto mediterráneo.

  • El mismo plantel presenta una media aritmética en Años como Profesional superior al restante plantel.

  • Si bien en ambos clubes la mayoría de sus deportistas son jugadores de la institución, en el Club Atlético San Martín una menor proporción de jugadores en relación con el Club Atlético Talleres son propiedad del club.

Al analizar las diferencias motivacionales entre la primera y segunda medición de cada club, se muestra un incremento en ambos clubes, siendo significativo sólo en el Club Atlético Talleres de Córdoba, y podría explicarse en función de:

  • La instancia deportiva se ha modificado, dejó de ser un momento clasificatorio para ser una etapa eliminatoria. Dicha etapa, es el momento final del torneo en que ambos clubes compiten, lo que implica que si siguen compitiendo se encuentran cerca de conseguir el objetivo de ascender a la primera División del Fútbol Argentino.

Queda claro entonces, que la instancia deportiva podría explicar el incremento dado que acercaría a los planteles a la consecución de sus objetivos deportivos.

Es necesario remarcar que si bien el estudio era de carácter exploratorio y el número de casos no era muy significativo, aparecieron datos relevantes para posteriores investigaciones, y para tener en cuenta en el trabajo de campo que los profesionales dedicados a esta área puedan realizar.

Resaltamos que en la investigación no se pudo corroborar el Modelo de Motivaciones Deportivas empleado para tal estudio, lo que podría entenderse debido al bajo número de casos, recordemos que N=40. El Modelo desarrollado por Dorcas Butt (1976) planteaba una cierta correlación entre determinadas Motivaciones Psicológicas y otras Motivaciones Sociales que no se pudieron comprobar. Pero sí fue acertada la dirección de los resultados, aunque no fueron significativos.

Sí se comprobó la incidencia que determinados Reforzadores Secundarios Externos y determinados Reforzadores Secundarios Internos presentaban en relación a los niveles de Motivaciones Deportivas. Éstos Reforzadores fueron presentados en los pasos anteriores de esta conclusión.

También destacamos que en nuestro trabajo no contamos con grupos extremos que nos permitieran encontrar resultados más significativos. Tengamos en cuenta que eran dos planteles de la misma divisional competitiva, y que tenían resultados similares y no presentaron fuertes cambios en su puntuación, lo que condicionó en cierta medida los datos finales de la investigación.

En función de lo realizado en esta investigación, queremos aportar dos variables a tener en cuenta para posteriores trabajos, que no fueron tenidas en cuenta como variables principales a la hora de definir los ejes de la tarea, pero que aparentemente o potencialmente podrían estar influyendo en los resultados encontrados.

La Instancia Deportiva cobra un papel preponderante en lo que refiere a su función como fuente motivacional. La misma puede hacer que a iguales resultados en distintas instancias varíe el nivel motivacional de los deportistas. No es lo mismo una etapa clasificatoria, en la cuál el margen de error es mucho más elevado, dónde los planteles se están conformando y donde la exigencia del público es menor aún; que una etapa eliminatoria donde un error lo deja al plantel automáticamente fuera de competencia, con todo el peso social que esto trae aparejado y las consecuencias para los deportistas que inevitablemente se sienten frustrados por la no consecución del objetivo planteado.

La otra variable es la Trayectoria del Club, la cuál se relaciona con la Motivación Deportiva a través de los distintos procesos de reconocimiento social. Los clubes que tienen una mayor y mejor trayectoria en el fútbol actual, tienen mayor exigencia para la consecución de los resultados, tienen un mayor caudal de aficionados y simpatizantes que influyen de manera adversa o apoyando al plantel según se den los resultados. Estos planteles necesitan revalidar constantemente los logros obtenidos con anterioridad.

Esto se ve claramente en la investigación ya que el Club Atlético Talleres de Córdoba es una institución que por su historia y por su convocatoria debería disputar los torneos superiores y no los torneos de ascenso de la Asociación del Fútbol Argentino.

Finalmente, se debe mencionar que la investigación realizada, configuro el Perfil Motivacional de ambos equipos estudiados, así como el perfil ideal el cuál es una decantación de las puntuaciones obtenidas. Si bien no se pueden generalizar los resultados, sería interesante corroborarlos con otros equipos de la misma divisional y de divisionales distintas para encontrar similitudes o diferencias.

REFERENCIAS

1. ANDER EGG, Ezequiel (1993). Técnicas de investigación Social. Editorial Magisterio del Río de La Plata. Buenos Aires

2. BUTT, Dorcas (1982). Modelo de Motivaciones Deportivas. Editorial Series. Barcelona

3. GOULD, Daniel – WEINBERG, Robert (1996). Fundamentos de la Psicología del Deporte y el Ejercicio Físico. Editorial Ariel. Barcelona

4. WIGHTMAN, Patricia (1994). La Fuerza para Ganar. Editorial 20 & 10. Buenos Aires

5. WILLIAMS, Jean (1991). Psicología Aplicada al Deporte. Editorial Biblioteca Nueva. Madrid

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